Ciego de Ávila.-La acertada idea de convertir el hotel Ciego de Ávila en hospital pediátrico constituyó una prioridad en el territorio y rinde los primeros beneficios con la atención y el egreso de más de 1 000 niños y adolescentes que fueron sospechosos o superaron allí la COVID-19, enfermedad que mantiene a la provincia en una compleja situación epidemiológica.
Cuanto se hace en la nueva institución, dedicada a la nueva labor desde inicio de del presente mes, constituye otro de los esfuerzos ingentes del Estado en el fortalecimiento de la red de centros vinculados a la atención de pacientes con la pandemia, en un territorio que no dispone de instituciones de Salud especializada para niños.
El doctor Abel Denis Ruiz, subdirector del nuevo hospital, confirmó que el promedio diario de casos que ingresan se eleva a unos 70 infantes y explicó que allí también se le da atención al acompañante, incluso, con atenciones médicas si fuera necesario.
«Este martes amanecimos con 175 niños ingresados, provenientes de las distintas áreas de Salud; todos se encuentran bajo estricta vigilancia médica, con un pediatra que permanece de guardia las 24 horas y otros tres refuerzan las labores en jornadas diarias de ocho de la mañana a cuatro de la tarde», precisó el especialista.
Argumentó que disponen del stock de medicamentos necesario para el tratamiento específico de la COVID y otras enfermedades que puedan padecer los infantes, además de la existencia de un cubículo equipado con oxígeno para el cuidado y la vigilancia de los menores que pudieran complicarse.
Si ello ocurriera, una vez estabilizado el paciente, se llama al 104, número establecido para entrar en contacto con el Sistema Integrado de Urgencias Médicas (SIUM), y es trasladado al Hospital Provincial General Docente Doctor Antonio Luaces Iraola.
Denis Ruiz afirmó que las habitaciones tienen un gran confort y en ellas los pacientes y sus acompañantes disponen de agua fría y caliente, televisor, aire acondicionado, refrigerador en varias de ellas, con un debido aseguramiento de los recursos hoteleros por parte de los trabajadores del turismo, que garantizan las labores de mantenimiento, limpieza y el servicio de camareras bajo estrictas medidas de bioseguridad.
Actualmente, Ciego de Ávila dispone de más de 40 centros de atención a pacientes positivos a la COVID-19, con casi 4 000 camas, casi todas ocupadas en la actualidad, para el ingreso de los enfermos.