Potenciar la economía en el municipio pinareño de Minas de Matahambre a partir del incremento productivo en diferentes áreas, conforma un objetivo primario a desarrollar, sobre todo, en las actuales circunstancias impuestas desde el inicio de la pandemia.
A través de los intercambios que realizan miembros del Buró Municipal del Partido y funcionarios del Gobierno con las juntas directivas de las diferentes cooperativas de producción agropecuaria y también con campesinos de forma individual, aprecian el incremento evidente en los planes de siembra, principalmente en lo relacionado con las viandas.
En este propio intercambio con los productores les recomiendan el aprovechamiento al máximo de cada espacio de tierra fértil que existe, para que la misma sea roturada con la prontitud que reclama.
Incrementar la siembra de arroz en la parte norte del territorio es una tarea que focalizan. Estos terrenos pueden llegar a convertirse en centro de alta obtención de gramínea, un alimento indispensable en la cocina del minero, a la vez que ayuda al engorde de cerdos y aves.
Muy loable es el movimiento generado hacia la diversificación de la agricultura urbana, suburbana y familiar, una iniciativa que multiplica alimentos muy necesarios.
Uno de los retos mayores que tiene ante sí el municipio es lograr los cinco kilogramos per cápita de proteína. Hay que convertir en una realidad la creación de módulos pecuarios en cada cooperativa de crédito y servicio.
Estos módulos pretenden concretarse con más énfasis en la unidad básica «Los Burros»; allí visualizan diferentes campesinos que pueden convertir en verdad esta idea tan práctica y así hacer que la carne esté más visible en los mercados y placitas.
La contratación certera de leche y carne vacuna está entre los asuntos de máxima prioridad por las autoridades del terruño.
En el país se destinan 150 millones de dólares para la importación de leche en polvo, por lo cual deben agotarse todas las posibilidades de contratación en pos de llevar a la industria la mayor cantidad posible del vital alimento.
En este sentido la siembra de pastos y forrajes debe duplicarse para que en Minas de Matahambre, Pinar del Río, resurja una transformación de los suelos.
