Afrocuban Beauty tiene previsto desarrollar un estudio conjunto con la Casa de las Américas sobre el arte del trenzado en Cuba.
Foto: Tomada de la página en Facebook de Afrocuban Beauty
La Habana, 18 jun.- Afrocuban Beauty es un emprendimiento cubano enfocado en sensibilizar a sus clientes para eliminar los prejuicios acerca del trenzado del cabello, además de promover esa expresión cultural y estética de la herencia africana.
Se trata de un proyecto creado por la joven Odelaine Herrera en 2019, que devino respuesta creativa en plena pandemia. En tiempos de distanciamiento y restricciones provocadas por la covid-19, las redes sociales sirvieron a la emprendedora para comunicarse con un público ávido de conocer particularidades del trenzado del cabello.
“Para mantenerme al día con las redes sociales, comencé a compartir fotos cada semana mostrando dos peinados diferentes que podían usar personas amantes de las trenzas, como yo; así comenzó la interacción, y a partir de mi canal de YouTube se estableció el vínculo”, comenta.
El primer reto para la creadora de Afrocuban Beauty fue la acuciosa investigación que asumió antes de mostrar su propuesta estética.
“Comencé a buscar en internet contenidos para instruirme porque no sabía cómo trenzar. Empecé a practicar con mi mamá como modelo hasta que decidí hacerlas a otras personas e insertarme en el mercado. Desde mi primer trabajo tuve muy buena aceptación del público y eso me impulsó a ampliar la gama de servicios”, explica.
Esa búsqueda informativa, asegura, le permitió “entender cómo, a través de los años, se ha fomentado un marcado prejuicio en cuanto al uso de las trenzas, un peinado que forma parte de la ancestralidad africana, no exento de una visión peyorativa en el presente”.
Apunta la afrodescendiente que ese sentido discriminatorio se expresa “al ver las trenzas como la opción más económica que usa la mayoría de las mujeres negras, carentes de la posibilidad económica para sufragarse un implante o unas extensiones mucho más costosas”.
A juicio de la estilista, los peinados con trenzas, también desde el prejuicio, se aprecian carentes de estilización.
A partir de ese enfoque, Afrocuban Beauty se propone reivindicar las trenzas como expresión artística, de ahí el estudio hecho por Herrera acerca de su significación y connotación no solo en el continente africano, sino también dentro de muchas naciones americanas.
De cara a la comunidad
Luego de un tiempo de estudio, la joven decidió “hacer extensivo a todas las personas este conocimiento, para informarlas sobre cuántos siglos de historia se esconden detrás de estos peinados”.
Al respecto, destaca que “las trenzas no son únicamente una opción para un cambio de imagen, ni una opción saludable sobre todo para las mujeres negras que se quieran alejar de productos agresivos para el cabello, como aquellos que emplean los alisados permanentes.
Para Herrera, “las trenzas significan, también, una manera de encontrar la identidad racial nacional. De cierto modo, es otra forma de defender la cultura”.
El trabajo de trenzado, según comenta la creadora de Afrocuban Beauty, demanda muchas horas y gran esfuerzo, resulta agotador. Por esa razón, ideó la realización de talleres informativos –totalmente gratuitos– con el fin de promover ese tipo de servicio. Así nació, bajo su liderazgo, el proyecto Trenzando cubanía.
Hasta el momento, refiere, “los talleres se han realizado en la Casa de África; pero la idea es llegar hasta las comunidades más apartadas”.
De igual forma, se propone ofrecer talleres prácticos a personas de La Habana y de otras provincias cubanas.
Esta experiencia comunitaria le permitió a Herrera elaborar un manual sobre los cuidados de los estilos protectores del cabello, como los distintos tipos de trenzado. Además, tiene previsto desarrollar un estudio conjunto con la Casa de las Américas sobre el arte del trenzado en Cuba, sus orígenes e historia registrada en la isla.
Desarrollo sostenible e inclusivo
Con el crecimiento de Afrocuban Beauty, su creadora decidió sumar a la propuesta de peluquería, accesorios y productos naturales que complementen el estilo afro. Así incorporó, por ejemplo, el uso de turbantes elaborados con retazos de confecciones mayores.
“Procuramos fomentar el desarrollo sostenible a través de la reutilización y aprovechamiento de los insumos textiles. Asimismo, estamos pensando en alguna opción para reciclar los pelos sintéticos que las personas desechan”, dice.
Afrocuban Beauty pondera el uso de las trenzas, independientemente de la raza, aun cuando la mayoría de las personas usuarias de este servicio es afrodescendiente. Por otra parte, su creadora aclara que los hombres pueden acceder al servicio tanto de trenzado como de definición del cabello.
“En las pasarelas contamos con un modelo que lleva drelos y usa turbante, en contraposición al criterio machista de que esa es una prenda privativa de las mujeres”, valora.
En lo adelante, Afrocuban Beauty aspira a consolidarse más, fidelizar sus clientes “para que se identifiquen con la necesidad de eliminar los prejuicios sociales en torno a las trenzas y puedan sentir orgullo de lucirlas. Es la mayor proyección social y ética de nuestro proyecto”, advierte Herrera.
Resalta, además, la pretensión de que “las trenzas sigan formando parte de la riqueza estética y cultural de la nación y no se conviertan en una moda transitoria”. De ahí que el emprendimiento se enfoque en mostrarlas “en su amplia variedad y belleza para todas y todos”. (2022)