Los Alazanes de Granma continuaron aferrados a su trofeo de campeones nacionales y mantuvieron su invicto en la postemporada de esta Serie Nacional 61, al batir por segunda fecha consecutiva a los Industriales de la capital, esta vez cinco carreras por tres.
Otra vez con una fórmula que lleva confianza, algunas salpicaduras de estirpe, defensa efectiva y mucha fuerza de muñecas, la tropa de Carlos Martí firmó una remontada histórica para derrotar con autoridad a sus contrarios.
Por segunda jornada consecutiva, los azules fueron los primeros en pisar la goma del plato cuando Yosvani Peñalver dejó caer un elevado detrás de la medialuna por la zona de tercera base que se convirtió en doble, válido para que Dayron Blanco anotara desde la primera almohadilla.
Pero esta vez. el abridor capitalino Pavel Hernández mantuvo muy quieto en sus establos a los caballos orientales durante seis capítulos, y no fue hasta el último tercio de juego que vinieron a reaccionar.
Mientras el espigado serpentinero ensillaba sus monturas y los domaba a su antojo, Yasiel Santoya le cazó un lanzamiento al zurdo Leandro Martínez en la sexta entrada y puso a volar la pelota por encima de los colchones con los sacos vacíos, que hizo arder Bayamo y enmudecer los graderíos del Mártires de Barbados.
Un episodio más tarde, los felinos de Guillermo Carmona volvieron a hacer sonar la registradora –ahora con Kelbis Rodríguez en el box– al combinar pelotazo y sacrifico con un cañonazo remolcador de Oscar Valdés, en lo que parecía el “tiro de gracia” para sus rivales.
En el llamado inning de la suerte llegó la estampida de los anfitriones, arrollando a su paso a los relevistas Erick Cristian González y Andy Vargas, para tomar el mando en el pleito. Un tubey de Osvaldo Abreu que trajo a dos compañeros a casa para dinamitarle el montículo a González, y un bambinazo de Guillermo Avilés que hizo temblar las rodillas de Vargas, sirvieron para fabricar el paquete de cuatro anotaciones.
En el octavo, otro vuelacercas –esta vez del enmascarado Iván Prieto con las almohadas vacías– terminó por cerrar las celdas donde entraron mansos los Leones hasta el próximo combate.
Carlos Santana puso el cerrojo al retirar a los seis adversarios que enfrentó, recetando ponches a tres de ellos.
Además de Abreu (4-2) y Avilés (4-2), destacaron por los ganadores Yosbany Millán, también de 4-2, y Francisco Venecia, al compilar de 4-3.
Por los derrotados también movieron los bates Peñalver y Ariel Hechavarría, ambos de 4-2, este último con un triple incluido.
El partido entre los Huracanes de Mayabeque y los Tigres de Ciego de Ávila fue sellado a causa de la lluvia en el séptimo capítulo cuando dominaban estos últimos 7-0, para reanudarse este sábado.
En ese juego Osvaldo Vázquez, Raúl González, y Yuddiel González, habían conectado cuadrangulares.