La nueva ola de protestas se ha desatado en el país y la propaganda y la oficialidad cubanas no han dudado en culpar —como siempre lo hacen— al Gobierno de Estados Unidos.
Como parte del guion, Humberto López —el tristemente célebre miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y comentarista de la televisión estatal cubana— volvió a dejar en la emisión de la revista televisiva Buenos Días del 18 de marzo de 2024 unas declaraciones que demuestran su disposición de mentir y manipular a conciencia.
López declaró —refiriéndose al Gobierno de Estados Unidos—: «ellos son los que nos asfixian; ellos, que hoy como siempre, alientan y fomentan las divisiones, divisiones no solo aquí, las fomentan en cualquier parte del mundo donde un conflicto implique beneficios o donde algún pueblo ose, como nosotros, pensar por sí mismo».
De esa forma, el comentarista vinculó las protestas con las «intenciones» históricas del Gobierno de Estados Unidos por controlar Cuba. Buscaba demostrar la falta de agencia de los protestantes y el «posible» alineamiento con los supuestos intereses de Estados Unidos. Unos intereses que, según López, podrían ser nefastos para los cubanos que protestaban.
En ese sentido, el militante comunista dijo:
«No debemos olvidar que en el hipotético caso, que no va a ocurrir, [de] que pusieran fin a la Revolución, hay (…) para Cuba una Ley Helms-Burton. Cuba, en ese hipotético caso, llevaría un coordinador. Un americano que va a dirigir todo (…). Y ese coordinador, como primera tarea, tiene que se devuelva a los ladrones y asesinos batistianos todo aquello que habían robado a este pueblo (…). Es quizá donde vives hoy, es quizá tu casa, donde está tu escuela, hasta la tierra hay que devolverla».
El parlamento de Humberto López —no sorprende— es FALSO.
COORDINADOR ESTADOUNIDENSE
La Cuban Liberty and Democratic Solidarity Act (Ley Helms-Burton) fue una ley impulsada en 1996 por el lobby cubano en el Congreso de Estados Unidos después del derribo de las avionetas de Hermanos al Rescate. La normativa pretende, en un momento determinado, codificar el sistema de sanciones y la política estadounidense en relación con Cuba. Establece cuáles son las condiciones que deben darse en la isla para que se levante el embargo y se restablezcan plenamente las relaciones entre La Habana y Washington.
La sección 207 de la Ley asegura que el Congreso de Estados Unidos considera que para reanudar de forma plena las relaciones económicas y diplomáticas entre Cuba y EE. UU. es preciso que se cumpla con una condición esencial, la «resolución satisfactoria» de las reclamaciones de propiedad formuladas en contra de «un Gobierno cubano reconocido por Estados Unidos».
Sin embargo, contrario a lo que dice el propagandista, la Ley Helms-Burton no establece el nombramiento de un administrador estadounidense que vele por la transición en Cuba; sino que establece requisitos sobre cómo y cuándo puede considerarse que en la isla hay un Gobierno de transición o uno electo. Pero no instituye el establecimiento de un interventor estadounidense que guíe el proceso.
En realidad, la principal mención que hace la Ley Helms-Burton de un «coordinador» estadounidense es en relación con la provisión de «asistencia económica» a Cuba. Según la legislación, una vez que el presidente de Estados Unidos determine, utilizando los criterios establecidos en la ley, que ha surgido un Gobierno de transición o electo en Cuba puede poner en marcha un plan o estrategia para distribuir asistencia económica en la isla.
La ley especifica que la ayuda será canalizada a través de agencias federales estadounidenses, de organizaciones no gubernamentales y de organizaciones privadas y voluntarias. Además, otorga al presidente de Estados Unidos la facultad de designar a un «funcionario coordinador» que se encargará de implementar la estrategia para distribuir la asistencia económica, de garantizar una distribución rápida y eficiente, de asegurar la coordinación adecuada entre las agencias estadounidenses que proporcionan asistencia, así como supervisar y resolver cualquier disputa entre ellas.
La Ley Helms-Burton establece también que solamente cuando en Cuba esté en el poder un Gobierno elegido democráticamente se podrá crear un Consejo Conjunto Estados Unidos-Cuba para asegurar la coordinación entre el Gobierno de Washington y el sector privado, para fomentar el desarrollo basado en el mercado y para organizar reuniones regulares entre representantes de los sectores privados de ambos países con el objetivo de facilitar el comercio bilateral.
PERDER LAS CASAS
Si bien queda claro en la Ley Helms-Burton que la resolución de las reclamaciones de propiedades es una condición esencial para el levantamiento del embargo, no todas las reclamaciones tienen igual protección