Después de casi cuatro años sin ofrecer un concierto exclusivo, Pablo Milanés regresó a La Habana y cantó para más de 10 mil personas. El espectáculo forma parte de su gira “Días de Luz” que inició en 2021 y que ha incluido escenarios de España y Estados Unidos.
En un inicio, el recital sería en la Sala Avellaneda del Teatro Nacional. La venta se redujo a unas 300 entradas para público general y el resto se reservó para organismos, según aseveró una funcionaria de la institución.
Esta decisión provocó disgusto entre quienes no pudieron adquirir las entradas. La presión en redes sociales, luego de este episodio, produjo que la locación para el concierto fuera reubicada hacia la Ciudad Deportiva.
La tensión en torno al evento fue tal, que se difundieron alertas sobre una supuesta bomba situada en la instalación. El aviso fue desmentido por fuentes gubernamentales.
A pesar de los percances, durante casi dos horas de concierto, Pablo interpretó canciones recientes y otras estrenadas hace más de 40 años; emocionó a un público compuesto por varias generaciones, entre quienes quedó la sospecha de que este sería su último concierto en Cuba.
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