La Liga de Naciones de la Concacaf está a la vuelta de la esquina y el director técnico de la selección nacional de fútbol, Pablo Elier Sánchez, llamó a 32 jugadores para armar la escuadra principal.
Esta convocatoria tiene a 14 futbolistas que se desempeñan en ligas de Honduras, Costa Rica, Guatemala, Estados Unidos, Brasil, España, Inglaterra, Italia, República Dominicana y Noruega. El resto del plantel viene de jugar el recién concluido Torneo Apertura.
Entre las caras nuevas que podrían vestir la camiseta cubana por primera ocasión aparecen el portero santiaguero Alfredo López, los mediocampistas capitalinos Lázaro Aballí y José Pérez, junto al artemiseño Pedro Bravo. Otros nombres que eran reclamados por la afición están llamados a la preparación, como el enganche villaclareño Roberney Caballero, el volante cienfueguero Neisser Sando y los atacantes Christian Flores (Santiago de Cuba) y Yasnay Rivero (Artemisa), estos dos últimos los mejores jugadores del Apertura.
Por supuesto, quedar conformes con la convocatoria es casi imposible, atendiendo a que son cerca de 50 figuras las que han hecho méritos para representar a Cuba. Futbolistas experimentados como los delanteros Ruslán Batista, de Granma, y el avileño Sánder «Keko» Fernández, quienes pueden aportar a los jóvenes valores, no hicieron el grado en este llamado. Tampoco están el portero Raiko Arozarena, el defensor Sandro Cutiño y el delantero York González.
Todo parece indicar que el cuerpo técnico cubano tiene ya definida una columna central en la que sobresalen los porteros Sandy Sánchez y Nelson Jonhston, y los defensas Carlos Vázquez, Modesto Méndez (ausente ahora por lesión) y Yosel Piedra. En la media cancha son casi inamovibles Karel Espino, Dairon Reyes, Aricheel Hernández y Luis Paradela. Para el ataque Marcel Hernández, Onel Hernández y William Pozo son apuestas bastantes seguras.
El resto de la plantilla puede seguir sufriendo algunas variaciones en cada llamado que se haga para el futuro, eso es lo que debe ocurrir normalmente. Ahora toca generar un ambiente positivo, en el cual prime la fuerte competencia de cara a hacer el grado con la selección mayor.
Si esta escuadra consigue desarrollar una buena preparación, libre de lesiones, podrá aspirar a un buen resultado en las primeras fechas de la Liga de Naciones de la Concacaf.