Las autoridades cubanas detuvieron y multaron el domingo a varias Damas de Blanco, las cuales volvieron a manifestarse en las calles, mientras que en Camagüey seis de las madres de los jóvenes que han sido juzgados sin garantías procesales llegaron, vestidas de negro, hasta la Catedral de la ciudad para orar por su hijos.
“Participamos en la misa, todas en oración pidiendo por la libertad de nuestros hijos, de nuestros familiares y demás presos, injustamente, por manifestarse pacíficamente el día 11 de julio. Agradecimos a algunos feligreses que nos acogieron, nos brindaron apoyo, ayuda en medicamentos si fuese necesario para nosotros”, resaltó Ailex Marcano, madre de Ángel Jesús Véliz Marcano, quien tiene una petición fiscal de ocho años de prisión.
“De allí nos dirigimos, caminando, un tramo hasta llegar a mi casa. Hicimos un desfile por la libertad de ellos, simbólicamente. Después compartimos café, compartimos algunos testimonios de nuestros hijos, de cómo fue la visita, compartimos experiencias. Todas las madres camagüeyanas estamos unidas”, dijo Marcano.
“Esta iniciativa la tomamos viendo que las Damas de Blanco fueron tan dignas y decidieron alzar su voz también por la libertad de los manifestantes del 11 de julio, nuestros hijos, que les estamos muy agradecidas. Yo, en especial, me quito el sombrero delante de las Damas de Blanco. Mil gracias a todos los cubanos que están por el mundo y que piden justicia y libertad para nuestros hijos y para nosotros los cubanos”, subrayó.
Las Damas de Blanco, organización fundada en 2003 por esposas y familiares de los presos políticos de la Primavera Negra, anunciaron el viernes que retomarían sus emblemáticas marchas para exigir la liberación de los más de 800 presos políticos cubanos.
Otras cuatro mujeres y algunos hombres acudieron a la misa en el templo de los Pasionistas de la Víbora en La Habana.
“Estuvimos en la iglesia un grupo de madres y familiares de los muchachos presos por el 11J pidiendo la libertad de nuestros muchachos”, dijo Caridad Magdalena Castro Ruíz, madre del joven de 20 años Kevin Damián Frómeta Castro a quien la Fiscalía pidió 18 años de privación de libertad por el delito de sedición.
“Kevin es un muchacho bueno, valeroso, del cual estoy orgullosa como madre, graduado preuniversitario, no es ningún delincuente, tiene, socialmente, una buena conducta. Se encontraba trabajando en el momento de los hechos, ya que no es ningún desvinculado ni marginado”, recalcó.
“Las madres estamos muy angustiadas, no tenemos para donde virarnos, nuestras voces son apagadas. La misa comenzó sobre las 10 de la mañana y el padre fue muy solidario con nosotros, se hizo eco de nuestras peticiones de libertad por nuestros hijos presos y habló muy bonito, nos gustó mucho su proyección. Esta iniciativa surgió casualmente: ir a la iglesia y pedir a Dios libertad para ellos, justicia. Fue una iniciativa propia, pero también apoyándolas [a las Damas de Blanco] porque ellas, igual, salieron a la calle por nuestros hijos”, indicó Castro Ruiz.
A la iglesia de los Pasionistas también acudieron hombres, como el padre de Jonathan Torres Farrat, Wilber Aguilar Bravo y Wilmer Aguilar, padre de Walnier Luis Aguilar Rivera.
La Seguridad del Estado arrestó a la líder de las Damas de Blanco Berta Soler, a las miembros del grupo, Lourdes Esquivel y Gladys Capote, y a Bárbara Farrat, madre del manifestante del 11J, Jonathan Torres Farrat, al salir de la sede nacional de la organización en Lawton en La Habana.
Asimismo, fueron arrestadas en la mañana del domingo en Colón, Matanzas, las Damas de Blanco Asunción Carrillo, Caridad Burunate y Yudaxis Pérez.
Las Damas fueron detenidas por varias horas y multadas antes de ser puestas en libertad.
