El Proyecto Palomas colaborará con PIES hasta febrero de 2022 desarrollando una estrategia comunicacional y otras iniciativas de apoyo al envejecimiento digno.
Foto: Cortesía Proyecto Palomas.
La Habana, 27 ago.- Gladys Infante, de 72 años, es una de las personas adultas mayores beneficiadas del Programa Integral de Envejecimiento Saludable (PIES) en el municipio Plaza, de La Habana, cuya experiencia visibilizará mediante cortos documentales el proyecto de audiovisuales Palomas.
“En PIES, los abuelos tenemos varias ventajas: conferencias, consultas con geriatras, masajes, áreas de esparcimiento y ejercicios”, explica la anciana que coincide en las bondades de la iniciativa con Francis Betancourt, de 68 años.
Para las personas de la tercera edad, dice Betancourt, es muy beneficioso, ya que comprende una serie de programas tanto comunicativos, socioculturales y sobre todo de salud, tan necesario en estas edades “para dar mejor vida a nuestros años”, apunta.
Necesidad y oportunidad
El índice de envejecimiento demográfico de Cuba al cierre de 2020 fue de 21,3 por ciento, mientras que en el municipio Plaza, el más envejecido del país, alcanzó el 28,9 por ciento, indica Jesús Menéndez, médico geriatra y coordinador del PIES en el referido territorio habanero.
En ese municipio residen 40.779 personas mayores. De ellas, el 10 por ciento vive sola y el 20 por ciento son dos personas mayores viviendo juntas y solas, explica el especialista. En ese contexto surgió PIES Plaza, iniciado en enero de 2016 y que se extiende hasta febrero de 2022.
Este programa lo ejecutan la Sociedad Cubana de Gerontología y Geriatría y el gobierno municipal, con financiación de la Unión Europea. Según Menéndez, se diseña un experimento de organización y efectividad de la integración multisectorial en el territorio que contribuiría a la toma de decisiones del Estado cubano respecto a sus políticas sobre las personas mayores.
“Se pretende lograr un empoderamiento intersectorial entre los diferentes actores sociales, dirigido a un envejecimiento saludable y activo”, precisa.
Dirigido principalmente a la tercera edad, incluye también a personal de las casas de abuelos, centros comunitarios de salud mental, personas cuidadoras y trabajadores sociales, profesionales y estudiantes de medicina y enfermería, activistas culturales y deportivos, asistentes sociales y actores comunitarios.
Acciones
Entre las acciones del programa está el acompañamiento al Ministerio de Salud Pública en la implementación de la estrategia nacional para la demencia, su diagnóstico y tratamiento, la creación de las bases para un territorio amigable con todas las edades.
Igualmente, apoya la creación de un aula de la tercera edad y un geroclub en el Centro de Desarrollo Comunitario en Envejecimiento Celia Sánchez, al tiempo que desarrolla talleres de empoderamiento multisectorial y trabajo colaborativo con los servicios socio-sanitarios y en la geriatrización de los médicos de la atención primaria de salud.
PIES, destaca Liliana Rodríguez, geriatra e integrante del grupo gestor, entrena para crear habilidades en cuidadores formales y no formales, genera indicadores de bienestar, forma al voluntariado adulto mayor en acciones intergeneracionales, derechos y empoderamiento en salud y capacita en las nuevas tecnologías.
En las acciones se unen el Centro de Investigaciones sobre Longevidad, Envejecimiento y Salud (Cited), sectores locales de salud, cultura, deportes y transporte, la Federación de Mujeres Cubanas, la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana y los clubes de computación.
A su vez, participan la Cátedra Universitaria del Adulto Mayor y la Facultad de Comunicación de la Universidad de la Habana, además de la Oficina de Gestión de Proyectos para el Desarrollo Local.
Destaca Menéndez que varias acciones del proyecto se realizaron antes de la pandemia y otras se ajustaron a la situación epidemiológica pues deben ser presenciales. “Las buenas prácticas que emanen del proyecto contarán con evidencia para su extensión al resto del país”, sostiene.
Alianzas entre proyectos
La amplia labor de PIES despertó el interés del proyecto Palomas, Casa Productora Audiovisual para el Activismo Social y comenzó a tejerse una alianza de ambos hace un año, de acuerdo con Sergio Cabrera, coordinador general del Palomas.
Dirigidos por las realizadoras Lizette Vila e Ingrid León, los audiovisuales abordan tres asuntos: el empoderamiento, la vulnerabilidad y el trato en los servicios.
En los cortos, precisa Cabrera, participan tres mujeres y dos hombres, siempre bajo el principio de la interseccionalidad y la inclusión de diferentes segmentos sociales, color de la piel y nivel cultural, todas personas adultas mayores.
A su juicio, “es un merecidísimo homenaje a ellos y a ellas y un modo de visualizar estas realidades a quienes tienen la responsabilidad no solo de trazar estrategias, sino de hacer efectivas las normativas y resoluciones que mejoran la vida de las personas mayores y que muchas veces no se cumplen”.
Anuncia Cabrera que PIES solicitó otros cinco cortos sobre deberes y derechos de las personas mayores, accesibilidad al mundo digital, ciudades amigables, viudez y soledad. (2021)