Para evitar el trasiego de personas en condiciones meteorológicas adversas se suspenderá a partir de las cinco de la mañana la circulación de ómnibus público. Foto: ACN.
El Consejo de Defensa Municipal (CDM) en Isla de la Juventud -activado la víspera- adoptó medidas para minimizar riesgo y reducir vulnerabilidades ante la inminencia de la tormenta tropical Ida, reseña la ACN.
Luis Sánchez Suárez, meteorólogo, informó que con la cercanía al suroccidente de Cuba del noveno organismo de la actual temporada ciclónica, ocurrirán fuertes marejadas en la costa sur, lluvias intensas y serán perceptibles vientos sostenidos de hasta 65 kilómetros por hora en todo el archipiélago de los Canarreos, del cual esta es la mayor ínsula.
Alertó el especialista que debido a la alta temperatura en las aguas del Caribe occidental, este meteoro pudiera convertirse en huracán categoría uno de la escala Saffir Simpson de un máximo de cinco, y provocar inundaciones en zonas bajas, inundaciones costeras y afectaciones a la agricultura.
Hasta la fecha, agosto registra una lámina de precipitaciones de 208 milímetros (mm), el 107,4 por ciento por encima de la media histórica (193 mm) para el octavo mes, considerado este año el más lluvioso, por tanto, los suelos están saturados, condición de riesgo ante la proximidad de Ida, subrayó.
Yaisel Cobarrubia Bravo, delegado de Recursos Hidráulicos, dijo que en la fase de alerta ciclónica mantienen estricto monitoreo a las presas, al 71 por ciento de su capacidad total de llenado.
Precisó el ingeniero que actualmente alivian sus aguas seis de los 14 reservorios y se estima que con las primeras lluvias otras tres sobrepasen el volumen de almacenamiento, en tanto, Los Indios y Libertad permanecen en cero por prevención hidrológica.
Si bien estas fuentes superficiales son estructuras seguras, se vigila El Abra, porque puede provocar inundaciones en la carretera Siguanea (de interés nacional), cuyas aguas alivian sobre Casas II, presa aguas arriba de un asentamiento poblacional.
Zunilda García Garcés, presidenta del CDM, indicó reforzar las medidas de seguridad para que las personas no salgan a pescar a los aliviaderos y quienes viven en facilidades temporales o en situación de vulnerabilidad se protejan en casas de vecinos, amigos o familiares, con condiciones técnico-constructivas seguras.
Insistió en la necesidad de preservar los bienes de la economía, a tenor del actual contexto clínico-epidemiológico de Cuba a causa de la COVID-19.
