El gobierno cubano está cometiendo “abusos sistemáticos” de los derechos humanos contra artistas y periodistas independientes, denunció este miércoles Human Rights Watch.
La organización dijo haber encontrado “patrones constantes y repetidos” que involucran acciones de policías y oficiales de inteligencia, al menos desde la protesta del 27 de noviembre frente al Ministerio de Cultura, a menudo contra las mismas víctimas.
“Cantar una canción que no le gusta al gobierno o reportar noticias de forma independiente es suficiente para que te detengan en Cuba”, dijo José Miguel Vivanco, director para las Américas de HRW. “Estos abusos no son incidentes aislados, sino que parecen ser parte de un plan para silenciar selectivamente las voces críticas“, añadió.
En los últimos meses, las autoridades cubanas han encarcelado y procesado a varios artistas y periodistas críticos con el gobierno. En otros casos, la policía y los agentes de inteligencia de la Seguridad del Estado se aparecen en sus viviendas y les ordenan que permanezcan allí, a menudo durante días e incluso semanas, señala un informe de la organización.
Según el reporte, las autoridades también han impuesto “restricciones específicas temporales a la capacidad de las personas de acceder a los datos de los teléfonos móviles”.
Human Rights Watch cita entrevistas telefónicas con 29 periodistas y artistas que dijeron haber sido “víctimas de abuso y acoso” por parte de las autoridades cubanas en los últimos meses. La organización señala que también revisó decisiones judiciales, publicaciones de grupos locales de derechos humanos e informes de los medios, y corroboró los videos publicados en las redes sociales.
La organización subraya que la mayoría de las víctimas de esta represión sistemática son miembros del Movimiento San Isidro y del 27N, pero también incluye a los protagonistas de “Patria y Vida”, o a “aquellos que simplemente han interpretado o promocionado” la canción crítica del sistema imperante en la isla.
Entre los funcionarios involucrados en los abusos se encuentran miembros de los servicios de inteligencia, conocidos en Cuba como “Seguridad del Estado“, y la policía nacional, según relatos de testigos y víctimas, así como fotografías y videos revisados por HRW.
El reporte añade que varios artistas y periodistas también han sido difamados con acusaciones falsas en la televisión nacional, donde han sido acusados de “delincuentes” y de “conspirar” contra Cuba.
“Los patrones de acoso sugieren fuertemente un plan de las autoridades cubanas para reprimir selectivamente a artistas y periodistas independientes. (…) Las restricciones selectivas sobre los datos de los teléfonos móviles de los críticos, así como los repetidos casos de acusaciones contra muchos de ellos en la televisión pública, son una prueba más del carácter sistemático de estas violaciones“, dijo la organización.
El informe denuncia, además, las restricciones a la circulación impuestas a las víctimas, impidiéndoles participar en manifestaciones o reuniones.
“Impedir que las personas abandonen sus hogares durante un período significativo, prohibirles socializar con otras personas y amenazarlas con el encarcelamiento si no cumplen, equivale a privaciones arbitrarias de la libertad comparables al arresto domiciliario de facto“, afirma el texto.
HRW cita el caso de la periodista independiente Iliana Hernández, reportera del portal digital CiberCuba, quien ha enfrentado estas restricciones de manera persistente desde el 23 de abril.
Entre las detenciones más prolongadas, el reporte menciona la del rapero contestatario Maykel Castillo “El Osorbo”, uno de los intérpretes de “Patria y Vida”, arrestado el pasado 18 de mayo.
“Su paradero fue desconocido para su familia hasta el 31 de mayo, cuando las autoridades cubanas les informaron que se encontraba detenido en un penal de Pinar del Río. La familia fue notificada unos días después de que el Comité de Desapariciones Forzadas de la ONU instara al gobierno cubano a revelar el lugar de detención de Castillo”, recordó el informe.
El informe también cita el caso del artista Luis Manuel Otero Alcántara, forzado a abandonar una huelga de hambre en protesta por la destrucción y confiscación de sus obras durante un allanamiento policial a su vivienda, que sirve de sede al Movimiento San Isidro.
Otero Alcántara permaneció recluido contra su voluntad en un hospital de La Habana durante casi un mes. Tras su liberación, el pasado 30 de mayo, recibió una advertencia de sus captores: “Me dijeron que, si no me portaba bien, podían hacer lo que quisieran conmigo”.
Amnistía Internacional dijo que el informe de HRW presenta “sólida evidencia” sobre las violaciones sistemáticas a los derechos humanos cometidas por el gobierno de Miguel Díaz-Canel en contra de artistas y periodistas en la isla.
“Nos unimos a la exigencia de libertad para todas las personas detenidas arbitrariamente” en Cuba, dijo en Twitter la directora de esa organización para América Latina, Erika Guevara-Rosas.