El factor humano y la irresponsabilidad de peatones y conductores ha sido determinante en el 67 por ciento de los 2 403 accidentes de tránsito que se reportan en los primeros cuatros meses de 2021.
Así lo informó este 12 e mayo Reynaldo Becerra Acosta, secretario general de la Comisión Nacional de Seguridad Vial, quien dijo que son 155 las muertes provocadas en la vía, 18 menos que en igual período del año anterior.
La principal causa es la no atención del control del vehículo, y la mayoría de los infortunios están relacionados con distracciones de ambas partes con el celular y no respetar el régimen de descanso en el caso del conductor.
Según las estadísticas, el segundo motivo es el incumplimiento del derecho de vía al cometer infracciones en señales Pare, Ceda el paso y en intersecciones de semáforos.
En conferencia de prensa, Becerra Acosta declaró que el exceso de velocidad y los desperfectos técnicos de los autos constituyen las otras causas, y es en La Habana, Camagüey y Holguín donde mayor cantidad de irregularidades por este último se detectan, siendo los problemas en la dirección y frenos los más comunes.
El secretario general de la Comisión Nacional de Seguridad Vial instó a los chóferes a ser más responsables al conducir, pues hacerlo bajo los efectos del alcohol ha dejado el saldo de 28 lesionados en lo que va de 2021.
En apenas los cuatro primeros meses del año se han aplicado, por la Ley 109 del Código de Seguridad Vial, más de 226 mil multas, siendo efectivas el 96 por ciento.
Asimismo, el atropello de peatón es el tipo de accidente más peligroso, por el que se acumula un fallecido por cada seis incidentes, acotó.
Becerra Acosta opinó que se ha logrado la reducción de los indicadores en comparación con 2020, sin embargo persisten insatisfacciones, y dijo que: «mejores cifras no dependen de la cantidad de multas que se impongan, si no del cambio de comportamiento de los usuarios en la vía, y para eso trabajamos», precisó finalmente.
Cuba continúa en su empeño por implementar los objetivos de desarrollo de la Agenda 2030, que aspira reducir a la mitad las muertes y lesiones causadas por accidentes de tráfico, con la aplicación de políticas para una movilidad sostenible y segura.
