La Embajada EEUU en Cuba aumentará su personal para “una reanudación limitada” de los procesos de visas suspendidos desde 2017, dijo este jueves a la prensa el encargado de negocios de Estados Unidos en La Habana, Timothy Zúñiga-Brown.
Esta reapertura es parte de “una expansión más amplia de las funciones de la embajada para facilitar el compromiso diplomático con la sociedad civil, y para ampliar la prestación de servicios consulares”, dijo la sede diplomática en un comunicado.
Mientras esta expansión se concreta, la Embajada de EEUU en Guyana continuará siendo “el principal lugar de procesamiento para los solicitantes de visa de inmigrantes cubanos”. Entretanto, los solicitantes de visa no necesitarán ponerse en contacto con las embajadas, ya que serán confirmados directamente con la información sobre su cita, puntualizó.
Durante el período de transición, el Centro Nacional de Visas programará las citas de los solicitantes en la Embajada en La Habana, o en la sede de Georgetown, en Guyana, “dependiendo de las necesidades operativas”, subraya la nota.
“Cuando comencemos el procesamiento limitado de visas de inmigrantes en la embajada en La Habana, también trabajaremos con el Centro Nacional de Visas para programar un número limitado de citas de visa de inmigrante para solicitantes cuya información está completa en términos de documentos”, dijo sobre el tema, en conferencia de prensa este jueves, la portavoz del Departamento de Estado Jalina Porter.
La sede consular de La Habana seguirá tramitando “visados de emergencia para no inmigrantes”, además de brindar “servicios esenciales a los ciudadanos estadounidenses”, añade la nota de la Embajada.
La decisión responde a un compromiso de la Administración del presidente Joe Biden de “explorar opciones para garantizar la dotación de personal en la Embajada de los Estados Unidos en La Habana”, y facilitar así “las relaciones diplomáticas”, el intercambio con la sociedad civil, y la prestación de servicios consulares, “mientras mantiene un plan adecuado de seguridad”, reiteró este martes un portavoz del Departamento de Estado a Radio Televisión Martí.
Los servicios consulares rutinarios en la Embajada estadounidense en La Habana quedaron suspendidos en 2017 bajo el gobierno del presidente Donald Trump, cuando más de 25 diplomáticos reportaron raras afectaciones de salud conocidas actualmente como el “Síndrome de La Habana”, y cuyas causas aún no han sido aclaradas. Los servicios consulares de esa sede fueron desviados a terceros países.
Los cubanos que realizaban trámites para emigrar bajo el programa de reunificación familiar se vieron, desde entonces, particularmente afectados, al tener que viajar a Guyana para las entrevistas. El programa sufrió una congestión, con más de 90 mil personas a la espera de la culminación del proceso migratorio.
En los dos últimos años, en medio de la desesperación por las afectaciones de la pandemia y la profunda crisis económica y social que vive la isla, decenas de miles de cubanos han recurrido a la emigración irregular.
En los primeros cuatro meses del año fiscal en curso, que comenzó el 1 de octubre pasado, un total de 30,763 cubanos ingresaron ilegalmente a Estados Unidos por los diferentes puntos fronterizos del país, según estadísticas del Departamento de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP) que muestran un alarmante incremento de estos casos.
Activistas cubanos tienen la esperanza de que, en medio de la ola represiva que siguió a las protestas antigubernamentales del 11 de julio, la reapertura de los servicios consulares de EEUU en La Habana incluya los programas para refugiados.
“Espero el restablecimiento de los servicios consulares en@USEmbCuba implique la reanudación del programa para refugiados, para que activistas perseguidos por el régimen no tengan que recurrir a vías irregulares, cada vez más peligrosas y costosas, en otros países con conflictos”, escribió en Twitter la activista Salomé García, del grupo Justicia 11J.
La congresista cubanoamericana María Elvira Salazar, que ha abogado por vías de solución a las afectaciones de servicios consulares en la Embajada de La Habana, agradeció a la administación del presidente Joe Biden por esta decisión, pero alertó sobre la necesidad de extremar las medidas de seguridad para proteger a los diplomáticos estadounidenses.
“Agradezco que la Administración haya decidido reanudar los servicios consulares en la embajada en Cuba. Sin embargo, insto a que sean vigilantes para garantizar la seguridad de los diplomáticos estadounidenses y espero que monitoreen de cerca al personal que se envía a La Habana”, señaló en su cuenta de Twitter.
Salazar es una de las firmantes, junto a otros legisladores cubanoamericanos del anteproyecto bipartidista, Ley de Modernización de la Reunificación Familiar para los Cubanos de 2021, que aboga por la reanudación del procesamiento de visas por reunificación familiar, incluidas las entrevistas, en la Estación Naval de EEUU en la Bahía de Guantánamo.
Según el comunicado, la Embajada estadounidense en La Habana espera “programar citas limitadas para algunas categorías de visas de inmigrantes tan pronto como sea posible”, y remitió a su sitio oficial en internet para más detalles.