Durante el día de ayer persistió la influencia anticiclónica sobre el territorio cubano, aunque un poco más debilitada que en días anteriores, por lo que hubo una disminución en la intensidad de los vientos del sur en la parte occidental del país.
Esta situación, en combinación con la inestabilidad del aire derivada del fuerte calentamiento vespertino y la convergencia del flujo, así como un ligero aumento en los valores de humedad, dio lugar a aislados chubascos y tormentas eléctricas en localidades del interior desde Matanzas hasta Camagüey.
Los acumulados fueron poco significativos según la red de estaciones meteorológicas y no superaron los 1.2 milímetros registrados en el Yabú, Villa Clara.
Las temperaturas máximas estuvieron entre 31 y 34 grados Celsius, aunque fueron ligeramente inferiores en zonas costeras. El valor más elevado fue de 34.8 grados Celsius y se alcanzó tanto en Guáimaro, Camagüey, como en Santa Lucía, Pinar del Río; le siguió Casablanca en La Habana con 34.7 grados Celsius.
La nubosidad remanente que en el interior ocasionó estas lluvias irá disminuyendo durante la noche, mientras que en el resto del país continuará el cielo despejado hasta el amanecer. Será una madrugada ligeramente cálida en zonas costeras.
(Con información del Instituto de Meteorología)