Trece normativas referidas a los derechos fundamentales, entre ellas la que prohíbe la desaparición forzada, fueron aprobadas por la convención encargada de redactar una nueva Constitución en Chile.
Según Radio Libertad, la iniciativa, que obliga al Estado a garantizar el derecho de una persona a ser buscada, se adoptó por 146 votos a favor, cero en contra y siete abstenciones.
Asimismo, fueron aprobados en el pleno de la convención otros artículos como el derecho a la vida y a la integridad personal, el cual establece que ningún ciudadano podrá ser sometido a torturas, tratos crueles, inhumanos y degradantes.
Según un informe de la Comisión Valech, publicado en 2011, durante el régimen pinochetista se registraron en el país más de 40 000 casos de violaciones de los derechos humanos, entre ellos 3 065 asesinatos y desaparecidos.
La prohibición de la amnistía para crímenes de guerra y delitos de lesa humanidad también se adoptó. Estos deberán ser investigados con la debida diligencia, seriedad, independencia e imparcialidad, de acuerdo con los estándares establecidos en los tratados internacionales vigentes en Chile.
Alicia Lira, presidenta de la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos, reconoció el triunfo que representa esta medida para los parientes de las víctimas de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) y un compromiso de que nunca más se repetirán estas violaciones.
«Es una señal, especialmente creo, para esas más de 900 familias que aún esperan encontrar los restos de sus seres queridos, darles una sepultura y cerrar el duelo», dijo.