“Este es el tercer día más alto de la semana”, alertó este sábado en referencia al número de casos que en Cuba han sido confirmados como positivos a la COVID-19, el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.
Desde el Palacio de la Revolución y durante la habitual reunión del Grupo Temporal de Trabajo del Gobierno para el enfrentamiento al nuevo coronavirus, el Jefe de Estado expresó que en la semana que acaba de concluir se produjo un incremento de casi 40 casos en relación con la semana precedente.
“Hay que controlar esa tendencia al incremento”, afirmó el dignatario en el encuentro que también estuvo presidido por el miembro del Buró Político y Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, y que a través de video-conferencia pasó revista a la situación epidemiológica de cada provincia y del municipio especial Isla de la Juventud, así como a otros temas de importancia para la vida nacional.
El punto de partida para el análisis en la reunión del Grupo Temporal del Gobierno estuvo a cargo del ministro de Salud Pública (Minsap), José Angel Portal Miranda, quien informó que en los últimos 14 días 7 399 personas fueron diagnosticadas como positivas a la COVID-19, para una tasa de incidencia de 66,8 por cada 100 mil habitantes.
Según detalló el titular, las provincias que en tal sentido mantienen los indicadores más elevados son Sancti Spíritus, Ciego de Ávila, Matanzas, Holguín y Mayabeque. Portal Miranda enfatizó que esos territorios muestran tasas de incidencia de la enfermedad por encima de la media del país.
Cuba acumula –según datos ofrecidos por el titular del Minsap- 8 503 fallecidos a causa de la COVID-19, lo cual representa una letalidad de 0.79/% durante todo el período de la epidemia. En el presente año, añadió, se han reportado 180 fallecidos para una letalidad de 0.16%, y no se reportan eventos activos.
Sobre la estrategia de vacunación, el ministro informó que según estadísticas registradas hasta el 10 de marzo de 2022, habían sido administradas a la población cubana 35 131 556 dosis vacunales.
Los números que hablan del comportamiento de la epidemia en los últimos tiempos, son elocuentes de cómo el proceso de vacunación en la Isla nos sacó masivamente del peligro para la vida que entraña la COVID-19. Pero ese gran logro de la ciencia no significa que resulte sensato bajar la guardia ante el nuevo coronavirus: en esta batalla que ha sido larga y llena de incertidumbres, la responsabilidad individual sigue siendo la actitud que salva y a la cual no debe renunciarse.