MIAMI, Estados Unidos.- Un funcionario de la Embajada de Cuba en Washington DC agredió física y verbalmente al periodista independiente Yosmany Mayeta, luego de que este y la activista Sheila Pérez Zayas hicieran una protesta pacífica frente al inmueble.
De acuerdo a un video publicado en Facebook por Studio Creactivo, en el que Mayeta narra lo sucedido esa noche, el funcionario le tira piedras al periodista y le dice “maricón”, un lenguaje que comúnmente utiliza el gobierno para denigrar a los opositores.
“Es algo cotidiano que cuando Sheila Pérez Zayas viene a Washington DC vamos a manifestarnos frente a la Embajada de la dictadura”, contó Mayeta.
Asimismo, “no es ajeno para nadie el gran numero de niños presos en la isla a raíz de las manifestaciones del 11J”, es algo que “no queríamos dejar pasar por alto, entonces decidimos hacer una cadenita de papel que simbolizara a los menores que se mantienen presos en las mazmorras de la dictadura”.
Yosmany Mayeta asegura que ambos sabían que la protesta iba a ser retirada, pero estuvieron un rato frente a la Embajada y luego decidieron irse. Sin embargo, en medio del camino “decidí regresar para ver desde un punto cercano el momento en que estos esbirros retiraran la cadena de papel. Me acerco y veo a un funcionario ya quitando la protesta, comienzo a correr para grabarlo de cerca y cuando el hombre se da cuenta que lo estoy grabando se lanza hacia mi a quitarme el teléfono”.
“Me lanza una piedra”, y luego comienza a llamarlo “maricón”. “Para nadie es un secreto que yo soy abiertamente homosexual y eso no me ofende, pero llamarle así a la gente es el medio que utiliza la dictadura para tratar de denigrar a los opositores”, relató Mayeta.
El pasado mes de enero el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) ante el Alto Comisionado para los Derechos Humanos de Naciones Unidas y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) que al menos 39 ciudadanos cubanos menores de 21 años se encuentran bajo “medida cautelar arbitraria y extrema de prisión provisional”, a la espera de ratificación de condenas de hasta 23 años de privación de libertad por participar en las protestas del 11 de julio (11J) de 2021.
De acuerdo al informe, en la isla se hallan “en estado de indefensión” 107 menores, adolescentes y jóvenes “que han enfrentado y/o siguen afrontando medidas penales por el simple ejercicio de derechos”; otras decenas “esperan la finalización de investigaciones policiales y la celebración de juicios arbitrarios para ir a la cárcel, habida cuenta todas las acciones desarrolladas en su defensa dentro de la isla han sido rechazadas o desestimadas bajo el brutal sistema de presión y de coacción implantado por fuerzas de la Seguridad del Estado”.
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