En mayo pasado, el sacerdote Fernando Gálvez se solidarizó con su homólogo en medio de una campaña del castrismo para desacreditarlo por apoyar al artista y activista opositor Luis Manuel Otero Alcántara, del Movimiento San Isidro (MSI).
El 5 de mayo, la página de Facebook “Mayabeque team vs Fake New”, publicó una nota en la que acusaba a Fernández Delgado de ser un “defensor de San Isidro” que “pone en riesgo la vida de sus feligreses”.
La arremetida del blog, presuntamente vinculado con la Seguridad del Estado, se debe a las críticas de Kenny Fernández al gobierno y su respaldo a quienes reclaman derechos en Cuba, como los integrantes del MSI.
Kenny Fernández marchó el 14 y 15 de noviembre en Madruga apoyando la convocatoria a una Jornada Cívica por el Cambio, hecha por el grupo opositor Archipiélago.
Católicos en la mira del régimen cubano
Los ataques del gobierno de Cuba a líderes católicos que respaldan los derechos humanos en la isla, se intensificaron en los últimos días.
El 14 de noviembre el sacerdote Alberto Reyes Pías denunció que la Oficina de Asuntos Religiosos del Partido Comunista amenazó a los padres de Camagüey que apoyaron al pueblo en la marcha ilegalizada por el régimen.
“Han llamado (…) para informar que tienen conocimiento de la intención del padre Ronaldo Montes de Oca, Castor Álvarez Devesa y mía de participar en la manifestación del 15 de noviembre junto a nuestro pueblo y que ellos informan que si nosotros participamos en esta manifestación vamos a ser detenidos”, dijo Reyes Pías.
“Somos sacerdotes para predicar el Evangelio, y el Evangelio de Jesucristo habla de libertad, habla de justicia y habla de verdad, esto que nuestro pueblo está pidiendo. Si ser detenidos es el precio por ser coherentes con la predicación del Evangelio, sea”, añadió.
Fernando Gálvez denunció que “represores” del régimen cubano realizaron un “acto de repudio” en el arzobispado de Camagüey el 15 de noviembre, para impedir que los religiosos asistieran a la Marcha Cívica.
“Aquí les comparto una imagen de la publicación de algunos represores que honraron al arzobispado de Camagüey con un acto de repudio donde se encontraba el P. Alberto Reyes y también arzobispo de Camagüey Wilfredo Pino”, publicó Gálvez en Facebook.
El cura difundió fotografías y un video que se grabó desde una azotea vecina al arzobispado. En las imágenes se observa un grupo de decenas de personas con música alta y gritando consignas en dirección a la sede de la institución religiosa. “¡Abajo la gusanera!” y “¡Patria o Muerte!” corearon en dirección al arzobispado.
La turba llevaba banderas con el rostro del extinto dictador Fidel Castro y de instituciones oficialistas como la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC), la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), e incluso había jóvenes con uniforme escolar de Preuniversitario.