El concurso anual de fotografía Through Your Lens, de la revista Scuba Diving, ofrece cada año una relación de extraordinarias fotografías submarinas que, en cuatro categorías, exploran la diversidad del mundo subacuático. Un certamen en el que se pone a prueba el talento de fotógrafos de todo el mundo en el manejo de la cámara compacta o el gran angular, la macrofotografía, así como su capacidad para capturar algunas de los comportamientos más insólitos que tienen lugar bajo la superficie del mar.
Las fotografías ganadoras, seleccionadas este año entre más de 1 700 instantáneas, destacan por su belleza y originalidad, además de por su capacidad para motivar e inspirar. No solo capturan escenas asombrosas, sino también encuentros únicos que arrojan luz sobre las complejidades del mundo submarino.
Vivo en la isla de Bonaire, y uno de los peces más comunes que encuentro durante mis inmersiones poco profundas es la isabelita negra o pez ángel francés. Es un pez territorial e inquisitivo que la mayoría de las veces se mete en el encuadre mientras intentas fotografiar a otras criaturas en el arrecife. En este caso, estaba totalmente concentrado para obtener un bonito retrato frontal de un pez ángel reina menos común, más tímido y más rápido que se escondía de forma intermitente detrás de una roca. Este pez ángel francés parecía querer ser la “prima donna”y se robó la escena.
Es habitual encontrar a las salpas individualmente en el mar, o formando parte de largas cadenas. Pero esa noche había innumerables colonias de salpas enrolladas en estas hermosas espirales, algo mucho más inusual. Los anfípodos Oxycephalus también son extremadamente comunes en inmersiones en aguas negras, pero cuando encontré la espiral más perfecta de salpas que halla visto, a la cual ademas un Oxycephalus parecía aferrarse como si fuera una balsa salvavidas, sentí que formaban un retrato que explicaba perfectamente la relación entre las diferentes criaturas que vagan por los océanos.
Esta escena tuvo lugar en la laguna de la isla Reunión (cerca de Madagascar), la isla francesa donde vivo. Me encontré con estos calamares de arrecife que descansaban bajo la superficie del agua. El calamar estaba tranquilo, por eso pude acercarme sin estresarlo. Tuve suerte de que estuviera colocado por encima de los corales, que le dieron color a su reflejo.
Soñé con mostrar la diferencia entre dos mundos , sobre la superficie y debajo del hielo, en una sola toma. No fue una tarea fácil: la diferencia en la cantidad de luz era notable. También quería incluir un buzo y algo en la parte inferior del marco. Hice cientos de inmersiones buscando un lugar donde pudiera combinar todos los detalles de mi toma. ¡Finalmente lo encontré!
En un fondo de coral, mientras buscaba organismos para fotografiar, vi a una bailarina española. Tomé algunas fotos de este hermoso nudibranquio, pero luego me percaté de la presencia de camarón emperador diminuto y colorido. Me di cuenta de inmediato del cromatismo que tenía el camarón con el nudibranquio, lo que le daba a la imagen la impresión de una pintura de acuarela.
(Tomado de National Geographic)