Las Tunas. – No importan el calor, la lluvia caprichosa en las tardes, la fatiga por el peso excesivo de los sacos en las espaldas. No importan tampoco las carencias de combustible o los achaques de los añejos camiones; ajustan en el cuerpo las fajas protectoras, aprietan un tornillo aquí, otro allá y siguen, porque los tiempos que corren no admiten demoras, ni cansancio, ni excusas.
Jornadas intensas viven los trabajadores de la Empresa Mayorista de Alimentos Las Tunas, desde que arribaron a sus predios este fin de semana las 240 toneladas de frijol y el atún enlatado, que serán distribuidos aquí a la población de manera gratuita, como parte de los donativos enviados a Cuba por naciones amigas, cuando el país atraviesa una difícil situación epidemiológica agravada por los efectos de un bloqueo cada vez más férreo, más atroz y más doloroso.
Raymel Espinosa Saborit, director adjunto del grupo Empresarial de Comercio en Las Tunas aseguró a este diario que la recepción y distribución de los productos la realizan con toda la agilidad posible, con el propósito de que antes de concluir la semana estén disponibles en todas las bodegas. Tal es así que hasta el momento el grano ya ha sido colocado en los ocho municipios, solo falta el atún en las localidades de Amancio y Colombia y se trasladará en las próximas horas.
El frijol, explicó, se repartirá de manera equitativa a los 522 mil 534 consumidores de la provincia a razón de una libra por cada uno y el atún, según la composición de de los núcleos. Los de una o dos personas recibirán una lata, los de tres a cinco integrantes serán beneficiados con dos latas, a los de seis a ocho miembros les corresponden tres latas y los de más de nueve personas obtendrán 4 latas.
La orientación a las bodegas es comenzar la distribución en cuanto dispongan de los recursos, para que las personas accedan a ellos rápidamente. Además, se insiste en que su arribo a las unidades no debe ser motivo de aglomeraciones innecesarias. Para ello se cuenta con el apoyo de los grupos de trabajo comunitarios, mensajeros acreditados y voluntarios del sector no estatal, que llevarán el donativo a los más vulnerables y a quienes se encuentran aislados.
Yunier Batista Jiménez, director de la Empresa Provincial Mayorista de Alimentos sostuvo que cuentan con todos los aseguramientos para el traslado. La actual operación, precisó, y las próximas cuando arribe el siguiente donativo, están respaldadas por varias empresas y diversos ministerios en aras de garantizar la fluidez y seguridad del proceso.
La ministra de Comercio Interior, Betsy Díaz Velázquez, explicó recientemente en la Mesa Redonda, que todos los productos donados a Cuba serán entregados de manera gratuita a la población, mientras los costos de almacenamiento, transportación y distribución los asume el Presupuesto del Estado. La población, agregó, dispondrá de 30 días para recogerlos.
No pocos se empeñan en demeritar el gesto amigo, sin pensar en cuanto debieron apretarse el cinturón esos países para, en plena contracción de sus economías a causa de la pandemia, compartir no lo que les sobra, sino lo que tienen. Ese abrazo de solidaridad, de humansimo, ya está aquí, y muy pocas horas estará en la mesa de todos los tuneros.