Corre con “velocidad crucero”, difícil de igualar para la mayoría de los mortales comunes. Sus años como maratonista le ganó el sobrenombre de Emperatriz de las carreteras cubanas. Emperatriz Wilson Traba, de 54 eneros, mantiene envidiable vitalidad que dedica por estos días a llevarle los alimentos a personas vulnerables por la COVID-19.