Aquel viernes 4 de marzo de 1960 el carguero francés La Coubre atracó en el muelle de La Habana como a las 9h30. Había embarcado mercancías en los puertos de Hamburgo, Amberes y Le Havre, las que también depositaría en puertos de Estados Unidos, México y Haití. Luego de activarse las medidas de seguridad se autorizó la presencia de personal extranjero a la nave. Inmediatamente, como indica el segundo capitán Jean Le Fèvre en su testimonio escrito, una veintena de soldados armados subieron a bordo y se distribuyeron especialmente en la parte trasera del barco, desde el puesto de mando.