Hasta ocho personas diarias podrían morir en el hospital Salvador Allende, de la capital cubana, debido a negligencias y el deterioro general de las instalaciones.
Estos sucesos ocurrirían en la “zona roja” del centro médico, ubicado en la calzada del Cerro, de La Habana, donde se atienden a los enfermos de Covid-19, explicó el doctor Lucio Enríquez, del Gremio Médico Cubano Libre.
Enriquez pudo contactar con una fuente dentro de la institución —que prefirió anonimato, aunque las conversaciones entre ambos están disponibles aquí—, quien ofrece otros datos incluso de mayor envergadura.
Según dijo, recientemente quedó fuera de servicio la planta eléctrica que mantiene los equipos médicos y murieron 12 personas. “No se pudo hacer nada”, comentó la fuente. Los fallecidos se reportaron como decesos por otras enfermedades, añadió.
Los familiares de estas personas no reportan la verdad ni hacen denuncias por miedo a represalias, agregó, aunque esta última información no ha sido comprobada por ADN Cuba.
En diálogo convocado por este medio independiente, varios especialistas coincidieron que las cifras de muertos y enfermos reportadas por el Ministerio cubano de Salud Pública deben tomarse con precaución, debido a estos hechos.
La víspera, el país sumó 3819 casos de Covid-19, para un total de 218 396 muestras positivas, 44 con fuente de infección en el extranjero y 80 sin fuente de infección precisada, según el último reporte del Ministerio de Salud Pública.
De los 218 396 pacientes diagnosticados con la enfermedad desde marzo de 2020, se mantienen ingresados 21 091, de ellos 20 918 con evolución clínica estable. En terapia intensiva se atienden 173 pacientes: 72 críticos y 101 graves.
Matanzas sigue a la cabeza de los registros diarios de casos por provincias, con 1327, seguida de La Habana (645) y Santiago de Cuba (387). Otros territorios reportar cifras superiores al centenar.
En redes sociales proliferan denuncias de personas abandonadas en los hospitales y las propias autoridades reconocieron que los centros médicos estás desbordados por la ola de casos.
La víspera, trascendió la muerte de una joven embarazada de 23 años con Covid-19, quien fue abandonada durante días en un hospital de Matanzas a poco de realizársele una cesárea, para salvar la vida de su hija.