Una distribución dispersa y retrasada de un suministro que sigue siendo limitado amenaza con crear, temporalmente, una nueva clase social que incluye no solo a la gente que corre más riesgo de infectarse o enfermarse de gravedad y morir, sino también a otras personas que, gracias a su trabajo o a su suerte, han podido ser inoculadas de manera rápida.
Condena juvenil a un holocausto
«He visto cómo los toman prisioneros», contó a la prensa Ocean Gao, una joven de ascendencia asiática, residente en New York, que estuvo ayer en