La Luna no tiene aire respirable, pero sí una atmósfera tenue, resultado del impacto de micrometeoritos a lo largo de miles de millones de años, demuestra un estudio publicado hoy en Science Advances.
Un equipo de los científicos estadounidenses del Instituto Tecnológico de Massachusetts y la Universidad de Chicago confirmó que el proceso de formación de la atmósfera de la Luna y que aún la mantiene, es principalmente la vaporización por contacto durante el impacto de los meteoritos.
Para llegar a estos resultados, los investigadores estudiaron muestras de suelo lunar tomadas por astronautas de las misiones Apolo y datos del orbitador lunar LADEE, ambos de la NASA.
Los análisis sugieren que, a lo largo de los cuatro mil 500 millones de años de historia de la Luna, su superficie ha sido bombardeada continuamente, primero por meteoritos masiv