La candidata neoliberal Keiko Fujimori admitió tácitamente la falta de sustento de sus acusaciones de fraude contra quien obtuvo el primer lugar en el balotaje peruano, Pedro Castillo, al hacer un pedido para conseguir pruebas.
‘Ya sabemos lo que hicieron para voltear la elección. Hoy necesitamos saber cómo lo hicieron’, manifestó en un mensaje por Twitter.
‘Si tienes algún testimonio o prueba de cómo Perú Libre (partido de Castillo) hizo trampa en mesa, denúncialo en tus redes, llévala a un medio (de comunicación) o envíala para que nosotros la hagamos pública’, agregó.
Dirigió el pedido no solo a quienes la apoyaron en el balotaje de hace 15 días sino también ‘a aquellos ciudadanos que hayan podido ver cómo se planificó esto, que quizá han visto cómo se hizo la trampa’, señaló en el clip publicado en Twitter.
Muchos ciudadanos señalados por el fujimorismo como ilícitamente suplantados en las mesas de votación o como víctimas de plagio de sus firmas, entre otras supuestas irregularidades contra Fujimori, han desmentido esas situaciones.
En la surandina región de Puno, la personera que representaba a Fuerza Popular (FP), partido fujimorista, en una mesa de sufragio, desmintió la supuesta suplantación de una integrante de la mesa, invocada por FP para anular el acta y la votación respectivas.
Además, hay 50 de las actas de sufragio que FP impugna pero fueron avaladas por personeros de ese partido con sus firmas.
La politóloga Alejandra Ames, ajena a Perú Libre, declaró que el fujimorismo sabe que no ganó y no va a encontrar pruebas en contrario, pues por lo menos dos equipos de expertos independientes han auditado las actas de sufragio sin encontrar señales de fraude.
La campaña que busca revertir el resultado del conteo oficial de votos o simplemente deslegitimar el proceso electoral y al nuevo gobernante, tiene expresión internacional en un grupo de exgobernantes derechistas como el colombiano Andrés Pastrana.
El personaje lanza continuamente afirmaciones falsas sobre un supuesto fraude en Perú que han sido sólidamente desmentidas por los organismos electorales, como la de sostener en falso que el acta de la mesa donde votó Fujimori había sido anulada.
Pastrana sostuvo en una entrevista televisiva que su amigo, el político derechista Alfredo Barnechea había denunciado en un programa peruano de TV que en el proceso electoral peruano hay intromisión del gobierno venezolano.
Atribuyó a Barnechea decir que ‘hay gente infiltrada venezolana en el manejo de la información y del software’ de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE).
El equipo periodístico ‘PerúCheck’ verificó que, si bien Barnechea sostiene que en el balotaje hubo ‘un masivo fraude’, nunca afirmó que hubiera manipulación venezolana en el software de la ONPE.