Los topes de precios a seis productos básicos vigentes desde este lunes en Cuba pueden ser “actualizados” por las autoridades de la isla y también aplicados a otras mercancías.
Así lo establece la resolución 225 del Ministerio de Finanzas y Precios (MFP), según la cual esta propia entidad, “en coordinación” con los ministerios del Comercio Exterior e Interior está encargada de “observar periódicamente el comportamiento de los precios de importación” de las mercancías topadas “para determinar las actualizaciones que correspondan”.
La norma, publicada este propio lunes en la Gaceta Oficial, apunta igualmente que estos ministerios tienen la potestad de proponer la “inclusión de otras mercancías” en el listado de los productos con precios restringidos por el Gobierno.
Estas disposiciones mantienen la puerta abierta a cambios en los topes recién establecidos, los cuales afectan por el momento al pollo, el aceite vegetal —excepto el de oliva—, la salchicha o “perrito”, la leche en polvo, las pastas y el detergente, considerados por el MFP como “productos de alto impacto en la población”.
De acuerdo con la resolución, desde este lunes el kilo de pollo puede ser comercializado por los diferentes actores económicos de la isla con un precio máximo de 680 pesos; el litro de aceite vegetal, 990 pesos; el kilo de salchicha, 1045 pesos; el kilo de leche en polvo, 1675 pesos; el kilo de pasta alimenticia, 835 pesos; y el kilo de detergente, 630 pesos.
La medida busca frenar la escalada de los precios de estas mercancías y, con ello, de la creciente inflación en el país, de acuerdo con las propias autoridades.
Recelos y críticas
Tras ser anunciado en reuniones locales con representantes del sector privado, el tope debía entrar en vigor la pasada semana, pero en ese momento fue frenado por las autoridades.
Entonces, el MFP argumentó que el frenazo se debió a “la necesidad de extender