Pese a la pandemia, el número de refugiados y desplazados internos en el mundo siguió creciendo en 2020, alcanzando un nuevo récord de 82,4 millones, según datos publicados por la ONU. Se trata del noveno año consecutivo de aumento, un incremento que ha hecho que a día de hoy haya más del doble de personas desplazadas de manera forzosa que hace una década.