La construcción de bienhechurías en tierras entregadas en usufructo se rige por las delegaciones municipales de Ordenamiento Territorial y Urbanismo. Foto: Michel Guerra.
A poco más de un mes del inicio del ejercicio de control al uso, tenencia y explotación de la tierra, el ganado mayor y los tractores en la provincia de Ciego de Ávila, ya se aprecian resultados preliminares que dejan ver brechas por donde se fugan una parte de los alimentos y la leche que necesita la población. Sin embargo, la detección de esas violaciones permite adoptar medidas inmediatas, sin esperar a que concluya la auditoría en su totalidad.
Giraldo Pérez Pérez, jefe del Departamento de Control de Tierra y tractores en la Delegación Provincial de la Agricultura, explicó a Invasor que, desde que comenzó el ejercicio en los 10 municipios, el 1ro. de marzo último, se encontraron 3606 ilegalidades, de las cuales 1400 ya fueron resueltas.
Enumeró, entre las de mayor frecuencia, las construcciones de bienhechurías, referidas al levantamiento de viviendas, ranchones, pozos y cuartos para guardar implementos agrícolas, sin el permiso emitido por el Instituto Nacional de Ordenamiento Territorial y Urbanismo (INOTU).
También se repiten la permanencia de tierras ociosas en manos de usufructuarios por diferentes causas y la desactualización o incumplimiento del contrato de producción, en lo que va de año, hecho este que constituye el principal objetivo de la entrega de tierras, en aras de que haya mayor aporte de alimentos.
Pérez Pérez destacó que el ejercicio debe concluir al cierre de diciembre, con la visita a la totalidad de los tenentes de tierra, que en el territorio ascienden a 14 927, entre propie