Los Juegos Olímpicos antiguos tienen su origen cerca del siglo VIII a.C. y como su nombre indica, rinden honor a los dioses del Panteón Olímpico griego, dominado por los 12 dioses olímpicos y presidido por Su Machísima Eminencia: Zeus. En este evento se realizaban fiestas deportivas donde se reunían los luchadores griegos en distintas competencias.
Los Juegos Olímpicos modernos fueron concebidos por el barón Pierre de Coubertin y se gestaron en 1894 en la Universidad de la Sorbona en París. Allí, el francés llamó a globalizar el deporte bajo el lema: «citius, altius, fortius» (más rápido, más alto, más fuerte).
Más de un siglo después, a estas competencias deportivas les nació una hija bastarda en la capital de una islita caribeña. Sin tanto trámite, se reunió un piquete de Gorgonas, más conocidas en la islita como «tortilleras», para descargar un rato, tomar cerv