Cienfuegos.–Giraldo Jiménez Campillo trabaja desde 2016 en la central termoeléctrica (CTE) Carlos Manuel de Céspedes, de esta provincia.
Es ingeniero mecánico, especialista a en mantenimiento industrial, y funge como jefe de brigada del área de Mecánica. En la planta cienfueguera pasa la mayor parte del día y, a veces, mucho más tiempo.
A él le corresponde conocer sobre las averías que se reportan desde el área de producción, y luego repartirlas entre los operarios para proceder a subsanarlas. Los trabajos pueden hacerse en unas horas o varios días, según la magnitud de las afectaciones. En ocasiones se les dificultan los materiales y piezas y, entonces, tienen que crear.
En 2018, con la ayuda de sus compañeros, incursionó en el mundo de la innovación. Entre los aportes para mantener la generación de la planta está, refiere, la recuperación del dentado de reductor del taprogge (taproche); pues, con el tiempo, esa parte de hierro fundido se fue desgastando por el roce, y Giraldo Jiménez se dio a la tarea de sustituirla por bronce. Hasta el momento se mantiene sin dificultades.
A raíz de eso, a los demás filtros que forman el equipo y que han presentado el mismo problema, se les ha aplicado esa alternativa.
Y es que unos 300 000 pesos se han ahorrado al aplicar su aporte, cuyo quehacer innovador no queda ahí. Su más reciente inventiva tiene que ver con la sustitución del reductor de la bomba de vacío (componente principal para que el generador eléctrico funcione correctamente) por un sistema de correas y poleas; pues el acople entre el reductor y el motor sufrió daños y no existían alternativas para corregir ese defecto.
Entonces, la tarea de primer orden fue buscar este nuevo sistema de transmisión. Recuerda que hubo que hacer muy bien los cálculos mecánicos para saber cómo debía ir, porque se sustituye el equipo, pero deben mantenerse sus propiedades para que funcione de forma correcta. Cuando la otra bomba presentó similar dificultad ya teníamos la solución, dice el joven cienfueguero.
POSITIVOS INDICADORES DE EFICIENCIA
Generar electricidad y buscar todas las alternativas para solucionar, en el menor tiempo posible, las averías que pudieran presentarse, son, efectivamente, compromisos que asumen y mantienen todos los trabajadores de la termoeléctrica Carlos Manuel de Céspedes.
Así lo asegura el ingeniero eléctrico Yeranis Zurita García, director general de esta industria, cuya generación bruta se ha comportado al 165 % de cumplimiento.
Explica que ese dato significa que han generado por encima del plan; un aporte esencial, pues otras empresas análogas del país no han podido hacerlo, debido a la compleja situación técnica que presentan, esencialmente por causa del bloqueo económico estadounidense.
Zurita García precisó que en el índice de consumo específico (cantidad de combustible necesario para generar un kilowatt hora), en la industria cienfueguera se han dejado de consumir 1,85 gramos, equivalentes a 1 434 toneladas de combustible dejadas de consumir y 2 460 de dióxido de carbono (CO2) que no fueron emitidos a la atmósfera, lo cual es muy favorable en el orden económico y financiero.
En cuanto al insumo eléctrico (cantidad de electricidad que consume el equipamiento para generar energía eléctrica) se evidencia un ahorro del 0,12 % respecto a lo planificado, lo cual se traduce en 948 megawatts hora dejados de consumir y, a su vez, en 750 toneladas de CO2 no expulsadas a la atmósfera.
Al abordar el indicador de la disponibilidad –el tiempo del año en que los bloques de la planta han estado disponibles para generar electricidad–, Zurita García indicó que, al cierre de mayo, de las 3 624 horas, en 2 765 han estado disponibles las unidades para generar electricidad, cumpliendo el plan al 102, 8 %.
Añadió que al mantenimiento se han destinado 268 horas y 89 a las averías. De acuerdo con los expertos en este tipo de industrias, representa un comportamiento excelente, pues indica que las unidades han estado el mayor tiempo generando electricidad, otro menor tiempo en mantenimiento, y en avería solo 3,7 días en lo que va de año. De ahí la estabilidad de la industria.