Tras dos años sin desfile debido a la pandemia de COVID-19, este 2022 se realizó en Cuba la marcha en conmemoración del primero de mayo. La ocasión sirvió, según comunicaron desde la Plaza de la Revolución, para que el pueblo patentizara su apoyo al proyecto social socialista y como advertencia a los enemigos internos y externos del país.
La marcha se produjo en un contexto agravado de represión política. Decenas de actores de la sociedad civil, entre quienes se encuentran familiares de los manifestantes condenados del 11J, fueron interrogados en días previos y sitiados para impedirles salir de sus casas.
El Gobierno cubano procuró demostrar en la fecha que aún cuenta con un alto apoyo popular y respaldo a la Revolución; pero tanto en las redes sociales, como a través de comentarios tras las cámaras, las personas remarcaron la imposición de la obligatoriedad para participar.
Este primero de mayo también trascendió debido a la pugna alrededor del acrónimo DPEPDPE que algunos insinuaron portarían en pullovers y accesorios durante el desfile.
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