El estreno de La gente del documental, un largometraje con guion y dirección del cineasta cubano Inti Herrera y con Reymel Delgado como productor, tendrá lugar en el cine Charles Chaplin, el próximo 5 de mayo a las 6:00 p.m.
Este audiovisual, filmado hace cuatro años en Washington y La Habana, es resultado del empeño y compromiso de un equipo de cineastas independientes cubanos por contar uno de los intercambios artísticos más importantes en la historia reciente de Cuba y Estados Unidos, refiere el Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos.
Fue en abril de 2018 cuando el Kennedy Center de Washington D.C. y el Ministerio de Cultura de Cuba, anunciaron en conjunto la realización del Festival Artes de Cuba. Por vez primera, una grandísima delegación de artistas cubanos (residentes dentro y fuera de la Isla) se presentaría en el Centro para las Artes y las Humanidades de la capital estadounidense, justo en un contexto de recrudecimiento de tensiones políticas entre ambas naciones.
La gente del documental toma como núcleo de inspiración ese evento, y se adentra en los vínculos artísticos que conectan a ambos países. Resulta un testimonio colectivo de varios actores –artistas, historiadores, políticos, gestores culturales, etc.– que se articula a través de la experiencia de un equipo de filmación independiente.
Entre los entrevistados se encuentran figuras del calibre artístico de Arturo O’Farril, Aymée Nuviola, Yissy García, Aldo López-Gavilán, José Parlá y Manuel Mendive.
También se recogen los testimonios de Emilio Cueto, abogado, coleccionista de arte e investigador cubano; Carlos Gutiérrez, secretario de Comercio de Estados Unidos entre 2005 y 2009, y Emily Mendrala, quien fuera directora ejecutiva del Centro para la Democracia en las Américas y actualmente se desempeña como subsecretaria adjunta de la Oficina de Asuntos del hemisferio occidental del Departamento de Estado de Estados Unidos.
“Si no puedes hacer un documental sobre lo que ocurre en el Kennedy Center es imprescindible tomar lo que allí ocurrió para desarrollar el documental sobre lo que constituye la verdadera esencia: el encuentro entre dos culturas y las posibilidades que cada una ofrece como vehículo de conciliación. El primer puente por donde puede transitar el entendimiento. Romper los juegos de contrarios y el odio”, explicó Inti Herrera, cuando ya el equipo se encontraba en Washington y recibieron la noticia de que no podrían filmar el evento.
La imposibilidad de realizar el proyecto como había sido concebido fue el punto de giro cardinal para narrar la historia que pronto estará disponible ante el público cubano. Una historia de resiliencia y creatividad, que explora conexiones humanas antiquísimas y cuyo estreno es posible también gracias a la coproducción de otros colectivos de creación como FACFILMS, Wajiros Films y La Rueda Films.
Según el criterio de su productor, Reymel Delgado, La gente del documental no solo recoge imágenes del importante intercambio entre ambas naciones. También resulta un material revelador por su valía testimonial para el futuro y su tesitura artística.
“Este proyecto ha sido para los productores un reto desde el punto de vista organizativo, un ejercicio de adaptabilidad en pos de seguir hacia delante y eso se ve reflejado en la película”, comentó.
Además de su estreno en el cine Charles Chaplin, el próximo 5 de mayo a las 6:00 p.m., el público podrá ver el largometraje también en la Sala 1 del Multicine Infanta, del 6 al 8 de mayo a las 5:00pm.
En la realización del documental colaboraron el Ministerio de Cultura de Cuba, Cuba Educational Travel, Estudio 50, Vistar, Ideal Glass, 2 Wolves Films, Clandestina, Startup Cuba y Campono Cafe.
Este proyecto fue premiado por el Fondo de Fomento del Cine Cubano, otorgado por el ICAIC.
Qué cuenta La gente del documental
Un grupo de cineastas independientes cubanos se prepara para seguir los acontecimientos del Festival de las Artes en el Centro Cultural Kennedy de Washington. El anuncio del evento, realizado en conjunto por el Ministerio de Cultura de Cuba y el Centro Kennedy de Estados Unidos, tuvo lugar un mes antes del comienzo del festival, luego de meses de discreta coordinación.
A través de los artistas invitados, la historia expresa lo complejo de las relaciones entre los dos países, lo difícil del desarrollo de las relaciones respetuosas. Cuenta cómo, a pesar de todos los obstáculos, el arte construye puentes entre pueblos, y recuerda que las fuerzas que unen son más profundas que las que dividen.
El equipo de filmación recibe una noticia: no van a poder seguir filmando las actuaciones en el interior del Centro Kennedy.
Nadie sabe por qué, y diversas reuniones no ayudan a esclarecer el suceso. Se ha perdido el punto de vista del documental. Las relaciones entre sus miembros comienzan a tensarse, pero deciden cambiar rumbo y continuar trabajando en otra dirección. A la vez, el poco presupuesto del que disponen comienza a agotarse. Realizan entonces un recorrido por las principales ciudades donde existe huella de la cultura cubana. Encuentran personajes que llevan no solo la condición de cubanos, también norteamericanos que luchan por conseguir un mundo mejor donde los intercambios culturales y la posibilidad de hacer cosas en conjunto sea viable.