MIAMI, Estados Unidos. – Este viernes, 4 de octubre, el régimen cubano pondrá en vigor su Ley de Comunicación Social. Según funcionarios del Instituto de Información y Comunicación Social (ICS), esta norma busca mejorar el sistema de comunicación en el país. No obstante, ya ha sido criticada como un nuevo instrumento de las las autoridades cubanas para limitar la libertad de expresión y el acceso a la información.
Belkis Pérez Cruz, vicepresidenta del ICS, dijo este miércoles en el programa estatal Mesa Redonda, que su entidad había recorrido “162 municipios del país” para socializar la nueva normativa. También señaló que, aunque la plantilla del ICS no está completa, “el 89% de los municipios ya cuentan con jefes o especialistas” que podrán comenzar a trabajar bajo el nuevo marco legal.
Por su parte, críticos han señalado que esta ley podría aumentar el control del Estado sobre los medios de comunicación y los canales de información. Aunque Pérez Cruz destacó el carácter “colectivo” del proceso de implementación, el papel central del ICS en la regulación de todos los aspectos de la comunicación —desde los medios organizacionales hasta los comunitarios— podría consolidar el control del régimen sobre los mensajes que se transmiten a la población.
Uno de los aspectos más discutidos de la ley es la regulación de la publicidad. Lorayne Izquierdo O’Farril, subdirectora general de Publicidad y Patrocinio del ICS, afirmó que “la ley reconoce la publicidad y el patrocinio como parte del sistema de comunicación”, pero también aclaró que la publicidad estará sujeta a un estricto control. Según la normativa, la publicidad de productos como el tabaco o las bebidas alcohólicas estará restringida a ciertos horarios y no podrá utilizar figuras públicas como deportistas o artistas.
Si bien es cierto que la protección de