Foto: Tomada de Prensa Latina.
La vigencia que mantienen los vínculos forjados hace 43 años entre el dirigente del Partido Comunista Italiano (PCI) Enrico Berlinguer y el líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro, fue abordada durante un acto en Roma.
Intervinieron en el evento, efectuado la víspera en la sede en Roma de la Asociación Enrico Berliguer, la embajadora cubana, Mirta Granda, así como el exdiputado de izquierda italiano Sergio Gentili y el presidente de la Asociación Nacional de Amistad Italia-Cuba (Anaic), Marco Papacci.
La diplomática consideró un honor poder asistir a este encuentro, para hablar sobre una figura tan relevante en la historia de Italia, desaparecida hace ya 40 años, el 11 de junio de 1984, y su relación con el Comandante en Jefe Fidel Castro, a partir de su viaje a la isla en octubre de 1981.
Ambos coincidían en la necesidad de construir un mundo mejor, con un orden económico más justo para los pueblos, que responda al interés de la paz en el mundo, expresó.
Berlinguer fue un hombre de rigor y humanidad, cuya compostura y empatía le ganó el aprecio y respeto del pueblo italiano, por lo que llegó a ser uno de los políticos del país más apreciados y respetados, el más querido dirigente del PCI, al cual llevó al más alto lugar en su historia, destacó Granda.
Es considerado como un de los líderes italianos más carismáticos de las últimas décadas, quien movía multitudes con su visión, por su lucha hacia el logro de objetivos futuros, a quien tenemos que acudir en los momentos actuales que vive el mundo, apuntó.
Por contar con tales valores, según dijo, no resultó extraño que Fidel Castro se interesase en conocerlo, y la visita que realizó a Cuba en 1981, la primera que realizó el político comunista italiano a un país latinoamericano, fue una oportunidad en la que debatieron sobre temas cruciales y se estableció entre ambos una positiva relación.
En tanto, Gentili se refirió a ese momento histórico y su trascendencia, así como a la vigencia de las ideas de Berlinguer y Fidel Castro, en estos tiempos de crisis y conflictos mundiales.
La lucha de ambos por el Nuevo Orden Mundial y la coexistencia pacífica, así como sus ideas sobre la cooperación entre los pueblos, deben
