Como parte de las medidas implementadas por el Banco Central de Cuba (BCC) para fomentar la bancarización en el país, el gobierno cubano y algunas instituciones estatales promueven el uso de canales de pago electrónicos, con estrategias poco aterrizadas en la práctica, diversas resistencias y obstáculos.
Los pagos electrónicos en Cuba atraviesan dificultades por factores como distorsiones generales de la economía, endeble infraestructura bancaria, acceso a internet y a la tecnología, cortes de electricidad, el nivel de asimilación y la comprensión de su funcionamiento entre la población, entre otros.
Estos sistemas, que son herramientas cruciales para modernizar los sistemas bancarios y facilitar la vida cotidiana de la población, resultan todavía hoy una novedad para la isla caribeña.
¿Qué son canales de pagos electrónicos?
Los canales de pago electrónico permiten que las personas realicen transacciones de forma digital, ya sea para comprar productos o pagar servicios sin la necesidad de usar efectivo o visitar una sucursal bancaria. Una pasarela de pago es una plataforma que transmite la información de la transacción de manera virtual, permitiendo compras en línea.
Estas plataformas verifican y aceptan, o en su caso rechazan, las transacciones electrónicas que se realizan entre compradores y vendedores. Se conectan directamente a las cuentas bancarias de los usuarios, haciendo que los pagos se realicen de manera rápida y segura.
Además, los bancos cubanos ofrecen varias opciones para que los usuarios accedan a sus productos o servicios sin necesidad de visitar una oficina bancaria, como sitios web, aplicaciones móviles, cajeros automáticos, terminales de puntos de venta y banca telefónica.
En Cuba, Transfermóvil y EnZona son las dos principales plataformas para realizar pagos electrónicos. Para que un comercio pueda recibir pagos mediante estos sistemas, necesita activar un código QR que está asociado al comercio electrónico. Una vez activado el código, los clientes pueden pagar escaneándolo con su teléfono móvil y siguiendo los pasos que indica la plataforma.
Los terminales de punto de venta, contratados a través de Fincimex, son otra alternativa para el cobro de servicios, aunque su implementación depende de las condiciones económicas y tecnológicas de cada región y establecimiento.