Cofundador de Telegram, Pável Dúrov.
Dos de los seis cargos que las autoridades francesas presentaron contra el cofundador de Telegram, Pável Dúrov, han causado gran revuelo en el sector tecnológico, ya que podrían afectar a otras plataformas de mensajería instantánea, según reveló Politico.
Las acusaciones se basan en la infracción de una ley del 2004 que obliga a cualquier empresa que ofrezca herramientas de criptografía a notificarlo a la agencia francesa de ciberseguridad (ANSSI) y a conservar una “descripción de las características técnicas de la herramienta criptográfica”, así como el código fuente del ‘software’.
Específicamente, los dos cargos se refieren al suministro de servicios criptológicos diseñados para proporcionar funciones de privacidad sin declaración obligatoria, y al suministro e importación de herramientas criptológicas que no proporcionan funciones de autenticación o verificación de integridad sin declaración obligatoria.
A diferencia de las otras acusaciones contra Dúrov, que consisten principalmente en distribuir contenidos ilegales, estos dos cargos fueron inesperados por otras aplicaciones que ofrecen funciones de correspondencia cifrada, como iMess