Antiguo Hospital Royal Victoria, de Montreal. Foto: montreal.citynews.ca.
Un grupo de mujeres mohawk espera detener las excavadoras de una obra en marcha en un antiguo hospital de Montreal que, según creen, podría contener la verdad sobre la suerte de niños indígenas desaparecidos hace 60 años en Canadá.
Llevan dos años intentando retrasar el proyecto de construcción de la Universidad McGill que respalda el Gobierno provincial de Quebec.
“Se llevaron a nuestros hijos y les hicieron todo tipo de cosas. Estaban experimentando con ellos”, declara a la AFP Kahentinetha, una activista de 85 años de la comunidad mohawk de Kahnawake, al suroeste de la ciudad de Montreal.
Las activistas sostienen su reclamo con base en archivos y testimonios que sugieren que en el lugar yacen tumbas sin marcar de niños que estuvieron internados en el Royal Victoria Hospital y el Allan Memorial Institute, un hospital psiquiátrico vecino.
En los años 1950 y 1960, detrás de los austeros muros del antiguo instituto psiquiátrico, la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos financió un programa de experimentos humanos llamado MK Ultra.
En tiempos de la Guerra Fría (1947-1991), el programa tenía como objetivo desarrollar procedimientos y fármacos para lavar eficazmente el cerebro de las personas.
Con ese objetivo, se llevaron a cabo experimentos en Gran Bretaña, Canadá y Estados Unidos, sometiendo a personas (incluidos niños indígenas de Montreal) a electroshock, drogas alucinógenas y privación sensorial.
“Querían borrarnos”, dice