El gobierno cubano está dando pasos desde fines de junio con la intención declarada de controlar precios, ordenar las relaciones entre actores económicos estatales y no estatales y conseguir una estabilización macroeconómica. Los problemas a que responden estas medidas centraron la atención de Consejo de Ministros en una reunión con que cerró el primer semestre.
La novedad más reciente la implementó el Ministerio de Finanzas y Precios (MFP) a partir de este 8 de julio, a fin de regular temporalmente los precios minoristas máximos de un grupo de productos de alta demanda. La medida, sin dudas polémica, la venía anunciando ese organismo desde días previos.
Con la Resolución 225 publicada en la Gaceta Oficial de la República, el Ministerio definió precios minoristas máximos para cinco alimentos de ventas elevadas, tanto en tiendas estatales como privadas: pollo troceado (680 pesos/kg), aceites comestibles (990 pesos/litro), leche en polvo (1675 pesos/kg), pastas alimenticias (835 pesos/kg) y salchichas (1045 pesos/kg), a los que se une el detergente en polvo (630 pesos/kg).
Esta Resolución también exonera del pago del impuesto aduanero a las importaciones de estos seis productos y reitera u