El representante de EEUU en La Habana entre 1979 y 1982 gestionó acontecimientos cruciales como el éxodo de Mariel en 1980, el regreso a la isla de miles de exiliados en los llamados “viajes de la comunidad” y la excarcelación de miles presos políticos, que en su mayoría se asilaron en los EEUU.
Diplomáticos cubanos y organizaciones que apuestan por el acercamiento entre Cuba y los Estados Unidos lamentaron el fallecimiento de Wayne S. Smith (1932- 2024), ex jefe de la Sección de Intereses de Estados Unidos en La Habana, quien apostó consistentemente por un acercamiento entre ambos gobiernos y manejó momentos cruciales en la historia de las relaciones de estos países.
Tras su muerte, el canciller cubano Bruno Rodríguez reconoció que Smith “promovió incansablemente una relación respetuosa de EEUU hacia Cuba, los vínculos bilaterales y se opuso al bloqueo”. Mientras Lianys Torres, encargada de Negocios de la Embajada de Cuba en Washington manifestó sentir “profundo dolor” por la partida del exdiplomático.
El autor de The Closest of Enemies: A Personal and Diplomatic Account of U.S.-Cuban Relations since 1957 (Los enemigos más cercanos: un relato personal y diplomático de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba desde 1957) defendió numerosos reclamos de La Habana como el levantamiento del embargo -una política que consideraba disfuncional- y de las prohibiciones de viajes a Cuba; el encarcelamiento de Luis Posada Carriles; el regreso a la isla de los espías de la Red Avispa, entre otro