Cuba se abre a las emociones de quienes saben querer; de aquellos que salen al terreno, cual si este fuera el escenario de unos Juegos Olímpicos o un campeonato mundial. El próximo lunes, adolescentes y jóvenes estarán llenando las canchas, las piscinas y las pistas con sus esfuerzos.
Son los Juegos Escolares, alacena gestora de más del 90 % de los títulos olímpicos, mundiales, panamericanos o centroamericanos y del Caribe, los que coparán toda la Isla.
Allí, el público es el pueblo, papá y mamá, los hermanos, los amiguitos del barrio, o la primera novia. Es como si esa afición también se entrenara para, en el futuro, verlo en las grandes ágoras del máximo nivel del orbe; aunque a