El director de la ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, dice estar al tanto de que el gobierno del presidente Joe Biden implementó nuevas restricciones a los solicitantes de asilo que ingresan a Estados Unidos, pero advirtió que algunos aspectos de la orden ejecutiva podrían infringir la protección a los refugiados requerida en el derecho internacional.
Filippo Grandi, alto comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, habló con The Associated Press mientras su agencia daba a conocer el jueves su informe anual “Tendencias Globales” para 2023. Halló que el número acumulado de personas que se han visto obligadas a efectuar un desplazamiento forzado se elevó a 120 millones de personas en ese año, 6 millones más que el año previo.
La ACNUR hizo notar que la cifra total equivalía aproximadamente a toda la población de Japón.
El informe de la agencia halló que tres cuartas partes de esas personas desplazadas a la fuerza —incluidos los refugiados que tuvieron que irse al extranjero y la gente desplazada dentro de su propio país— vivían en naciones pobres o de ingreso medio. Grand