Carlos Alcaraz, de 21 años y 33 días, ha hecho historia para el tenis español al convertirse este viernes en el duodécimo miembro de la ‘Armada’ masculina capaz de colarse en la finalísima de Roland Garros. Foto: Marca.
Carlos Alcaraz, de 21 años y 33 días, ha hecho historia para el tenis español al convertirse este viernes en el duodécimo miembro de la ‘Armada’ masculina capaz de colarse en la finalísima de Roland Garros. Su sueño de niño está a una victoria de cumplirse y todo gracias a su ejercicio de superación en la semifinal ante Jannik Sinner y que terminó con un 2-6, 6-3, 3-6, 6-4 y 6-3, en 4 horas y 9 minutos.
El tenista, que bate por donde pasa récords de precocidad, es el profesional más joven en plantarse en finales de ‘Grand Slam’ en tres superficies distintas: dura, tierra y hierba. La gloria espera este domingo contra el ganador del cruce entre Alexander Zverev y Casper Ruud.
Sinner empezó mejor, más dentro y menos nervioso. La situación recordaba a la semifinal del Masters 1000 de Indian Wells, donde la racha de triunfos del italiano en la presente temporada tocó a su fin ante el mismo adversario.
Jannik ganó entonces el primer set por 6-1. Alcaraz cedió este viernes los dos primeros turnos de saque. El primero con una derecha a mitad de pista que no pasó la red. El marcador, en un abrir y cerrar de ojos, era de 4-0 en 16 minutos.
El murciano no encontraba el ritmo en la central Philippe Chatrier. La grada le aplaudía porque quería ver un partido emocionante entre el nuevo ‘Big Two’ de la raqueta.
El pupilo de Juan Carlos Ferrero tardó 21 minutos en estrenar su casillero. El 4-1 pa