Fuerzas israelíes atacaron este sábado con tanques y artillería la ciudad de Rafah, al sur de Gaza, al tiempo que el primer ministro Benjamin Netanyahu volvía a insistir en que solo la destrucción de Hamás pondrá fin a la guerra, según reportaba AFP.
Las declaraciones de Netanyahu se conocen poco después de que el presidente estadounidense, Joe Biden, revelara el contenido de una propuesta de paz israelí que Hamás había calificado de “positiva”.
Hamás había dicho estar de acuerdo con un “alto el fuego definitivo, la retirada de las fuerzas israelíes de la Franja de Gaza, la reconstrucción de Gaza y el intercambio de prisioneros”, según recogieron despachos como el de la agencia española EFE.
En un comunicado, el grupo palestino dijo estar dispuesto a tratar de forma constructiva cualquier plan que incluya esos puntos.
A la espera de un acuerdo de paz duradera
Según Biden, la oferta israelí es posible porque Hamás ha quedado “devastado” tras ocho meses de guerra y ya “no es capaz de repetir unos atentados como los del 7 de octubre” del año pasado.
El plan de tres fases propuesto por Israel, según Biden, empezaría con una tregua que incluiría la retirada de las tropas israelíes de las zonas pobladas de Gaza por seis semanas y la liberación de algunos rehenes en manos de Hamás a cambio de presos palestinos.
Comprendería después un “gran plan de reconstrucción” del enclave palestino y la devolución de los cuerpos de los rehenes muertos. “Esta es la oferta que está ahora sobre la mesa. Es lo que hemos estado pidiendo y lo que se necesita”, manifestó el mandatario de Estados Unidos.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, dijo, entretanto, que esperaba que los últimos gestos “conduzcan a un acuerdo entre las partes para una paz duradera”, según informó