El Tribunal Municipal de Buey Arriba, en la provincia Granma, condenó a un sujeto a tres años de correccional sin internamiento por el delito de abuso sexual de carácter continuado a una niña de cuatro años.
“¡Creo que esa sentencia fue tan vergonzosa! Aquí en Cuba un delincuente mata a una vaca y son de 8 a 9 años de prisión. Entonces un delincuente que abusa de una niña le ponen 3 años de trabajo correccional sin internamiento”, lamentó Yelenis Pinilla, la abuela de la pequeña.
“Pasó esto por la corrupción que hay aquí en este país de jueces y fiscales, que es impresionante y triste y porque el delincuente es un agente de la Seguridad del Estado cubano, que a esos son los que ellos reclutan, a los delincuentes mayores, ese tipo de personas es el que reclutan”, subrayó.
“Este pueblo es chiquito, y como dicen ‘pueblo chiquito, infierno grande’ y se sabe que el criminal es un agente”, insistió la abuela.
El fallo de los jueces Rutmary Moreno Carrazana, Yenima Suarez Millán y Luis Leyva Rivero, con fecha del 20 de febrero de 2024, dio por consumado que, en una fecha indeterminada antes del 9 de julio de 2023, la víctima A. M. Contino Pinilla se personó, sin vigilancia de ningún familiar adulto, en la vivienda del agresor Maikel Solano Arévalo, circunstancia que este aprovechó para llevar la niña a una habitación, despojarla de sus ropas y satisfacer sus instintos, pero sin penetrarla.
El documento revela que el relato tan detallado y espontáneo de la pequeña y las declaraciones de la madre fueron fundamentales para probar la culpabilidad del sujeto.
“En cuanto a la sentencia y a la manera en que se tramitó el proceso, se evidencia que esta persona no estuvo en ningún momento privada de libertad. De hecho, la medida cautelar que le aplicaron durante todo el proceso fue una obligación contraída en acta, o sea, ir a un lugar determinado que puede ser una unidad de la policía, a firmar una vez por semana o una vez cada 15 días, etcétera”, indicó el abogado del centro de asesoramiento legal Cubalex, Alaín Espinos