Dieciseis días en Cuba le costaron a una turista rusa cerca de un millón de rublos y, luego de la experiencia, la mujer asegura que no quiere regresar.
Elena Liseykina contó en su blog “Viajar con una cámara” algunos de los obstáculos que enfrentó en la isla.
“A diferencia de los países normales, donde primero recibes un servicio y luego lo agradeces, en Cuba primero tienes que desembolsar unos dólares y luego esperar tener una toalla limpia en tu habitación. O no aparecerá”, detalló.
Antes de irse de vacaciones, Liseykina valoró la opción de los particulares pero se dio cuenta que el gasto sería aún mayor. Entonces compró un paquete en un hotel todo incluido, donde ni siquiera disponía de agua caliente para hacer el te.
Cuba y su apuesta por el turismo ruso
El régimen de La Habana ha apostado por los rusos para fortalecer el sector turístico internacional, considerado como la “locomotora de la economía” en la isla pero que no ha logrado recuperarse tras la pandemia del coronavirus.
Entre enero y marzo de este año Cuba re