En los últimos cinco años, la industria de los alimentos en Cuba ha ido en caída libre. En ese periodo, entre las producciones más deprimidas, destacan el arroz, el pan, el café, los aceites vegetales refinados, los lácteos y la carne de cerdo en bandas, todos básicos en la dieta cubana.
En su informe “Industria Manufacturera en Cuba. Indicadores seleccionados 2023”, la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI) detalla que de los 23 rubros alimenticios escogidos ninguno reveló crecimiento entre 2018 y 2023.
“Muestra un retroceso hasta de un 67% en la producción de alimentos durante los últimos cinco años. Los 23 productos seleccionados por la ONEI, entre los que se incluyen alimentos básicos necesarios para la canasta familiar, presentan una baja sostenida, en algunos casos superando el 90% en la disminución de la producción”, indicó el politólogo Sergio Ángel Baquero, coordinador de Food Monitor Program, que investiga el impacto socioeconómico de las políticas alimentarias en contextos autoritarios.
“Aunque el colapso de alimentos en Cuba ha sido adjudicado al embargo en el discurso oficial, este informe evidencia que las cau