Eugen Sandow posa imitando a una escultura griega (1894)
El fisiculturismo es una práctica deportiva enfocada en el desarrollo y la definición muscular, valiéndose para ello de entrenamientos de fuerza y resistencia. Es casi imposible que esta especialidad pase desapercibida para todo el que en algún momento haya visitado con cierta regularidad el gimnasio. Desde afiches, hasta videos motivacionales nos sumergen en este mundo.
De Heracles a Milón
Desde los propios orígenes de la humanidad, se registran indicios de que nuestros antepasados idolatraban a seres con poderes muy por encima de la media, o sobrenaturales. Según varios investigadores, ello es reflejo del afán por lograr algo que es inalcanzable, o por el deseo de evitar o dar solución inmediata a fenómenos como las catástrofes naturales. Lógicamente, el hombre forzudo ha formado parte central de ese imaginario cultural y religioso.
En Egipto y durante la Grecia antigua, el cuidado del cuerpo y mantenerse en forma eran una obligación social. No resultó muy difícil para el hombre percatarse de que los ejercicios de fuerza provocan el aumento de la masa muscular, por lo que inicialmente estos se realizaban alzando troncos de madera, rocas o animales menores. La preocupación por la constitución física se consideraba reflejo de rectitud moral y valor interior. Las esculturas se representaban siguiendo estos patrones estéticos: hombros anchos, cinturas estrechas y muslos potentes. Ello sentará las bases del fisiculturisno moderno.
En la mitología griega, Heracles -Hércules para los romanos- era conocido por su increíble fuerza y valentía. Hijo del dios Zeus y de la reina mortal Alcmena tuvo que realizar doce trabajos desafiantes que demostraron su poderío físico y su destreza en la lucha contra monstruos y bestias.
Su presencia en la cultura contemporánea es inmensa y resulta de todos los fornidos de la antigüedad el más conocido. Es el arquetipo por antonomasia del hombre fuerte.
Ánfora griega en la que se representa el primer trabajo de Heracles (530 a.C)
Resulta llamativo el paralelismo entre este personaje y el de Sansón, en el Antiguo Testamento de la Biblia. Ello hace suponer a los investigadores que este último está inspirado en el mito griego.
Conocido por su fuerza sobrenatural, Sansón fue capaz de derrotar con sus manos a u