A partir del impacto de la pandemia en la economía cubana, del fracaso del ordenamiento monetario en 2021 y del ensanchamiento del déficit en el presupuesto del Estado el mercado cambiario informal ha estado creciendo y se ha convertido en un canal vital para las remesas, el turismo, la importación de bienes e insumos y el funcionamiento de las pequeñas y medianas empresas.
La tasa de cambio informal coexiste con dos tasas de cambio oficiales ampliamente sobrevaloradas. De enero de 2021 hasta abril de 2024, el peso cubano se ha depreciado 660 % frente al dólar estadounidense en el mercado paralelo.
La principal referencia (aunque no es la única) del valor del peso cubano en el mercado informal proviene de la plataforma multimedia independiente elTOQUE . elTOQUE ha estado extrayendo y procesando información sobre el mercado de divisas paralelo de Cuba utilizando una metodología novedosa. Los datos se obtienen de redes sociales y de sitios web a través de algoritmos de inteligencia artificial que permiten el procesamiento del lenguaje natural (NLP, por sus siglas en inglés). Los algoritmos identifican y extraen la información sobre quién compra, quién vende, qué moneda, a qué tasa y qué cantidad.
La publicación de la tasa de cambio representativa del mercado informal (TRMI) desde elTOQUE ha generado un acalorado debate en el que se enfrentan detractores y defensores que emplean todo tipo de argumentos y en el que, en ocasiones, sobresalen frustraciones y cansancio frente a la inflación y a la crisis económica, posiciones políticas extremas, limitada educación financiera y varias teorías de la conspiración.
La intolerancia del Gobierno cubano ante un medio informativo crítico frente a las políticas oficiales constituye un factor motivante de campañas de desinformación que acontecen en la prensa estatal y en las redes sociales. Culpar de la desvalorización del peso y de la inflación a un ente externo cabe bien dentro del guion que por décadas ha usado el Gobierno para evadir responsabilidades y desviar la atención.
Varios de los economistas cubanos dentro y fuera de la isla han encontrado coherencia entre la trayectoria de la TRMI y el proceso inflacionario que vive el país, la monetización del déficit fiscal, el estancamiento de las exportaciones y de la producción nacional y la ausencia de un programa de estabilización macroeconómica para enfrentar los desequilibrios.
El aumento sostenido del número de usuarios que emplean de referencia la TRMI de elTOQUE para sus operaciones debería ser prueba suficiente de que la metodología ha logrado capturar la tendencia del mercado.
Para un observador externo pueden resultar extrañas las discusiones que se han generado alrededor de la publicación de la TRMI en Cuba. Es común y útil en cualquier mercado publicar índices que resuman la tendencia de los precios. Es especialmente importante en los mercados financieros para mitigar el problema de la «información asimétrica» (una parte en una transacción tiene más o mejor información que la otra), lo cual lleva a tomar decisiones erróneas, a afectar e