La belleza interpretativa de sus bailarines, quienes despliegan un alto nivel técnico y artístico en espectáculos coloridos, que incluyen peinetas, estolas, abanicos, tacones, castañuelas y vestidos de colas; y en los cuales se fusionan una antología de danzas españolas con el sabor cubano, caracterizan cada presentación del Ballet Español de Cuba (BEC), que por estos días está celebrando el aniversario 37 de su fundación.
La compañía, que desde el 1992 dirige el primer bailarín Eduardo Veitía, es uno de los más altos exponentes de la interpretación y enseñanza de la Danza Española en Cuba.
«Han logrado ir creando en todo este tiempo, un lenguaje teatral contemporáneo a partir del complejo cultural del flamenco y otras raíces de nuestra idiosincrasia, que no es en modo alguno una tradición muerta, sino una poderosa savia popular que fl